Aunque aceleró otra vez en marzo, el BCRA dejó subir el dólar en el primer trimestre menos que un año atrás
Avaló un alza de 3,1% en el mes y de 8,07% en el año, ajuste medio punto inferior al de 2021; todavía se mantiene corriendo detrás de la inflación
Pese a que el Banco Central (BCRA) aumentó en el último mes un punto porcentual la tasa de devaluación del peso frente al dólar (2,31% a 3,31%), el ritmo de actualización del 8,07% que validó del tipo de cambio oficial al cabo del primer trimestre del año quedó unas décimas por debajo del que había permitido en igual período de 2021 (8,57%).
El curioso dato llega en un momento en que el mercado se encuentra expectante por ver si la entidad cumplirá el compromiso que tomó al comenzar el año de “readecuar la tasa de crawling peg al ritmo de la inflación”, tal como explicó al explicitar sus objetivos 2022.
Esa estrategia, que tiene como objetivo preservar el nivel de competitividad externa de la economía, luego fue reafirmada en el acuerdo con el FMI, por lo que el compromiso que asumió el BCRA al respecto puede considerarse “doble”. ¿Cómo se entiende entonces que la devaluación haya sido menor que hace un año?
Los analistas explican que, pese a lo que muestra el dato, las tendencias son distintas, por lo que no puede considerarse a esta señal “predictora”. Entre otras cosas, porque –como es notorio– el BCRA no solo se quedó sin reservas propias, sino que incluso enfrenta notables dificultades para recomprarlas,
Mientras en marzo del año pasado había suma do a sus arcas US $1476 millones con intervenciones sobre el mercado (un total de US$2266 millones en el primer trimestre), este año a duras penas cerró el mes adquiriendo US$275 millones. Es decir, poco menos del 19% de lo captado en marzo del 2021 ya un cuando había comprado U S $300 millones de un “saque” el 7 del mes, cuando implementó las limitaciones a las importaciones que ya llevaron a un millar de empresas a presentarse ante la Justicia.
Así cerró en negativo el balance de los primeros tres meses del año en casi US$40 millones (diferencia neta de US$2300 millones con el año anterior), pese a la suba de los precios internacionales de los granos.
“Lo que pasa es que el año pasado fue de más a menos en el primer trimestre del año y ahora va al revés. En aquel momento venían de mover más rápido el dólar después de la corrida de septiembre/octubre de 2020, y luego apareció Guzmán anunciando que lo pisarían para tratar de imponer su pauta de 29% de inflación de cara a las paritarias pensando en las elecciones. Ahora va para arriba y creo que deberá seguir acelerando”, explicó el economista Camilo Tiscornia, director de C&T Asesores Económicos.
Juan José Vázquez, jefe de estrategias del Grupo Cohen, coincidió. “La diferencia radica en que el año pasado fue después del primer trimestre que se impuso la decisión del Gobierno de atrasar el tipo de cambio para usarlo como ancla contra al suba de precios y llegar en mejores condiciones a las elecciones de medio término”, detalló.
El analista aclaró que aunque el dólar sigue moviéndose rezagado respecto de la inflación, el BCRAhasta ahora el objetivo cambiario asumido con el FMI, dado que este fue fijado en relación con el tipo de cambio real multilateral, algo que la sostenida apreciación que ha tenido en los últimos meses el real brasileño (arrancó 2022 en 5,7 y ahora esta en 4,75) lo ayudó a mantener.
Juan Ignacio Paolicchi, de Empiria Consultores, coincidió también con sus colegas al describir las razones que generaron esta llamativa diferencia, pero planteó dudas respecto de la capacidad que tendrá el BCRA de acelerar el deslizamiento, dado “el nivel de inercia inflacionaria”.
“Eso limita el ritmo de depreciación. No dudo de que el BCRA la aceleraría más en otro contexto, pero con este nivel de indexación se le va a hacer difícil”, advirtió.