La CGT se metió en la disputa para reforzar la demanda
Los gremios apoyaron en un comunicado la gestión del tigrense
Apenas unas horas después de conocerse el contenido de la carta que Sergio Massa le envió al ministro de Economía, Martín Guzmán, en lo relativo al impuesto a las ganancias, la Confederación General del Trabajo de la República Argentina (CGT) salió en bloque a respaldar el pedido del titular de la Cámara de Diputados.
En un comunicado firmado por sus tres secretarios generales, la CGT reforzó la gestión de Massa con un mensaje en el que advierte sobre los riesgos de la suba generalizada de los precios.
“Venimos trabajando desde el inicio de la actual ronda de paritarias, que continúa desarrollándose, para que los salarios conseguidos en las mesas de negociación no se vean afectados por la incidencia del tributo y se actualicen los valores sobre los cuales los trabajadores y trabajadoras tributan”, destacó el comunicado de la central obrera, que lleva las firmas de Héctor Daer, Pablo Moyano y Carlos Acuña.
Desde la central sindical, valoraron que el Gobierno haya definido una “política salarial de recuperación y crecimiento del valor real de los salarios de los trabajadores, como un objetivo central de la política económica”.
“Justicia social”
Sin embargo, aclararon: “Entendemos que modificar los montos actuales es un acto de estricta justicia social”, remarcaron en relación a los topes, a partir de los cuales los trabajadores en relación de dependencia pagan impuesto a las Ganancias, correspondiente a la cuarta categoría.
“La CGT seguirá bregando por el crecimiento del valor real de los salarios como un instrumento determinante en la redistribución de la riqueza, y por lo tanto pedimos la pronta modificación de los topes salariales sobre los cuales los trabajadores tributan ganancias”, señaló la entidad gremial.
El reclamo por los alcances del impuesto a las ganancias fue una de las banderas de Pablo Moyano, quien como número dos del sindicato de los camioneros se enfrentó en 2011 con la gestión de Cristina Kirchner por el peso de este tributo en el salario de sus afiliados. Moyano siempre lo calificó como “un impuesto al trabajo”.ß