Irán ataca a periodistas y celebridades que apoyan las protestas
Acusan a personalidades de incitar a que se produzcan disturbios; “no a la dictadura”
TEHErÁN.– Irán redobló ayer la presión sobre celebridades y periodistas en medio de la ola de protestas que sacuden al país desde hace días por la muerte de la Mahsa Amini, la joven de 22 años, que murió tras haber sido detenida por la policía de la moral por no llevar puesto correctamente el velo.
Cineastas, atletas, músicos y actores apoyaron las protestas, incluida la selección nacional de fútbol, cuyos jugadores cubrieron sus camisetas con un chaleco negro durante el himno antes de un partido en Viena contra Senegal.
“Tomaremos acciones contra los famosos que sopla ron las brasas” de los “disturbios”, dijo el gobernador provincial de Teherán, Mohsen Mansouri, citado por la agencia de noticias ISNA. El jefe de la Justicia iraní, Gholamhossein Mohseni Ejei, también lanzó un aviso similar contra aquellos que “se han hecho famosos gracias al apoyo de nuestro sistema [...] y se han unido al enemigo en lugar de estar con el pueblo”.
“Todo el mundo debe saber que deben resarcir los daños materiales y espirituales causados al pueblo y al país”, agregó.
Ayer fue detenido un periodista que había cubierto en las redes sociales el funeral de Amini. Días atrás fue arrestada Nilufar Hamedi, del diario Shargh, que ayudó a dar a conocer el caso.
Las advertencias llegaron casi dos semanas después de que se desatara una ola de protestas en Irán, duramente reprimida, a raíz de la muerte de Amini, una kurda que murió tres días después de haber sido arrestada por el incumplimiento del estricto código de vestimenta que rige para las mujeres en la república islámica. La policía de la moral la detuvo entonces por llevar mal puesto el velo o hijab.
“¡Mujer, vida, libertad!”, corean los manifestantes desde entonces, en las concentraciones más importantes ocurridas en el país en casi tres años. Muchas de las mujeres que asistieron han desafiado al poder quemando sus pañuelos o cortándose el pelo.
Según la agencia de noticias iraní Fars, “alrededor de 60 personas han muerto desde que comenzaron las manifestaciones, el 16 de septiembre, mientras que la ONG Iran Human rights, con sede en Oslo, informó de al menos 75 muertos.
El presidente iraní, Ebrahim raisi, advirtió que, a pesar del “dolor y la tristeza” causados por la muerte de Amini, la seguridad pública “es la línea roja de la república islámica de Irán y nadie está autorizado a violar la ley y provocar el caos”.
La muerte de Amini recorrió el mundo entero. En muchas ciudades del mundo, desde Estambul, Nueva York, hasta Buenos Aires, miles de personas se manifestaron en solidaridad con las mujeres iranís y contra el régimen iraní. Para mañana se han convocado marchas en 70 ciudades.
En la capital afgana, Kabul, unas 25 mujeres se manifestaron frente a la embajada de Irán, con pancartas que rezaban “Irán se ha levantado, ahora es nuestro turno” o “De Kabul a Irán, di no a la dictadura”.
Las fuerzas de seguridad de los talibanes dispersaron a la multitud con disparos al aire e intentaron golpearlas con palos, al tiempo que requisaron las pancartas y las rompieron frente a las mujeres.
También en Estambulseconc entraron unas cien personas frente al consulado de Irán, mientras que en Oslo, dos personas resultaron heridas y unas 90 fueron arrestadas durante unos enfrentamientos ocurridos durante una protesta cerca de la embajada iraní.ß