LA NACION

La Ciudad ya presentó 16 denuncias penales contra los padres

El gobierno nacional, en tanto, interpuso un habeas corpus, en señal de apoyo a los alumnos

- Jesús Allende

El conflicto entre alumnos de diferentes escuelas porteñas y el Ministerio de Educación de la ciudad recrudece, con doce institucio­nes tomadas en la primera semana. Los estudiante­s protestan principalm­ente contra la aplicación de las prácticas profesiona­lizantes, reclaman más y mejores viandas escolares y denuncian “persecució­n política”, mientras que la cartera que conduce la ministra Soledad Acuña decidió avanzar con acciones penales y civiles contra las familias, a las que responsabi­liza de presuntame­nte haber fomentado que sus hijos participar­an.

En la Justicia se abrieron dos vías, la administra­tiva –mediante una acción civil en la que el Poder Ejecutivo porteño reclama por daño del patrimonio educativo– y la penal. Hasta el momento, según consignaro­n a la nacion fuentes del gobierno de la ciudad, se realizaron 16 denuncias penales contra las familias para la averiguaci­ón de la comisión de una contravenc­ión, es decir, un acto ilegal para el que se contemplan penas menores que para los delitos.

Las primeras quedaron radicadas en la Unidad de Flagrancia Este, la fiscalía que las recibió y que deberá definir las posibles medidas procesales aplicables y si avanza con la investigac­ión. Resta esperar si todas quedan unificadas allí o si van a intervenir otras fiscalías en simultáneo.

A los padres denunciado­s se les imputa haber violado el derecho de admisión, una norma que prohíbe ingresar o permanecer en un establecim­iento público (en este caso, la escuela) en contra de la voluntad de las autoridade­s. Ocho de ellos son de la comunidad educativa de la Escuela Normal Superior en Lenguas Vivas Nº 2 Mariano Acosta, el primer establecim­iento en participar de las tomas, pero cuyo centro de estudiante­s luego desistió de continuar.

En medio de la disputa se sumó el gobierno nacional, que también acudió a la Justicia para que la administra­ción de Horacio Rodríguez Larreta retire a la policía porteña de las inmediacio­nes de las institucio­nes educativas que son sede de tomas y pernoctes. Según informó la Secretaría de Derechos Humanos, a cargo de Horacio Pietragall­a, se presentó un habeas corpus en defensa de los adolescent­es involucrad­os en las protestas.

En el caso de las medidas legales impulsadas por la Ciudad, las denuncias fueron presentada­s en el fuero penal, contravenc­ional y de faltas, que deberá investigar si hubo una violación del Código Contravenc­ional porteño.

La presentaci­ón judicial, que se realizó a través de la Procuració­n General, les imputa a las familias haber violado el artículo 60 de ese cuerpo normativo, que sanciona el ingreso o la permanenci­a en contra de la voluntad de un titular del “derecho de admisión”. Quien detenta el derecho en esta oportunida­d son los directores de las diferentes escuelas y, por tratarse de establecim­ientos públicos, este recae finalmente en el gobierno de la ciudad.

La norma no prevé penas de cárcel, sino que establece como sanción que quienes sean hallados culpables realicen tareas comunitari­as o paguen una multa. Respecto de los servicios a la comunidad, el castigo establece un máximo de cinco días, mientras que los montos de las multas oscilan entre los $200 y los $1000.

Protocolo antitomas

En 2018, el Ministerio de Educación porteño estableció un protocolo de actuación contra las tomas que forma parte de las “Pautas de la convivenci­a escolar”. La resolución dispone para los casos de tomas estudianti­les un procedimie­nto en el que se le da intervenci­ón al Consejo de Niñas, Niños y Adolescent­es, así como al SAME, y por último, se cita de forma inmediata a las familias para informarle­s que en esas condicione­s el establecim­iento no puede asegurar el cuidado de los menores, por lo que tienen que retirarlos.

El protocolo, una vez activado por la protesta estudianti­l, establece que cuando haya padres que se nieguen o que convaliden la permanenci­a de sus hijos en la escuela se labra un acta administra­tiva en la que se individual­iza al adulto responsabl­e y los motivos de su conducta. A partir de la informació­n de las actas que recabó el ministerio durante el actual conflicto, la Procuració­n General presentó las denuncias en la Justicia por la presunta comisión de una contravenc­ión.

Como se dijo, las primeras actas que se labraron fueron a padres del colegio Mariano Acosta que consintier­on que sus hijos participar­an de las tomas. Luego se fueron sumando el resto de las escuelas hasta alcanzar un total de dieciséis denuncias. Por el momento, la Ciudad se limitó a presentar las acciones penales, pero no se constituyó como querellant­e en las causas, por lo que la responsabi­lidad de que la investigac­ión avance o no recae en su totalidad en las fiscalías que interviene­n.

En paralelo, se iniciaron expediente­s en el fuero contencios­o administra­tivo y tributario, en el que se busca que se repare el presunto daño generado en el patrimonio de la ciudad por el pago de sueldos a personal docente y no docente en las jornadas educativas que se interrumpi­eron por las tomas.

El valor laboral estimado por día que difundió la Ciudad sobre las escuelas que están ocupadas por sus estudiante­s es el siguiente: Mariano Acosta, $1.503.006,55; Lengüitas, $1.309.718,96; Federico García Lorca, $374.206,17; María Claudia Falcone, $377.585,05; Mariano Moreno, $876.608,45; P. Guaglinome, $554.251,75; Cerámica Nº 1, $820.410,56, y Osvaldo Pugliese, $291.178,16.ß

Newspapers in Spanish

Newspapers from Argentina