La defensa dijo que Báez recibió amenazas para que acusara a Cristina
El abogado reveló que sufrió “aprietes y extorsiones” en el penal de Ezeiza; afirmó que el empresario “apostó por el país”
Con el alegato de la defensa de Lázaro Báez se reanudó ayer el juicio oral en la causa Vialidad. Su abogado, Juan Villanueva, insistió en que el empresario patagónico es inocente y reveló que mientras estuvo en la cárcel de Ezeiza lo amenazaron para que acusara a Cristina Kirchner. Denunció que la fiscalía “montó un show para esconder que no tenía pruebas”.
Los fiscales Diego Luciani y Sergio Mola pidieron hace algunas semanas una condena de 12 años de prisión contra Báez en la causa en que es investigado -junto con la vicepresidenta- como presunto miembro de una asociación ilícita que defraudó al Estado a través del direccionamiento de la obra pública vial de Santa Cruz.
Según la fiscalía, los Kirchner “crearon” a un empresario para estafar al Estado y prueba de ello es que Báez, exempleado de un banco, constituyó Austral Construcciones días antes de que Néstor Kirchner asumiera el poder, en mayo de 2003.
“Lázaro no era ni un cajero de banco ni un monotributista”, dijo Villanueva, al destacar que su defendido fue el gerente general del Banco de la Provincia de Santa Cruz y que antes de la creación de Austral Construcciones ya había sido director titular de otra empresa constructora, Badial SA.
“Trabajó 12 años en el Banco Nación y 14 años en los cargos jerárquicos más altos del Banco de Santa Cruz. Está todo documentado. En 2000, Lázaro se retiró de la actividad bancaria para dedicarse a la labor empresarial en el ámbito de la construcción y fue director titular de Badial”, relató Villanueva. Dijo en su alegato que la fiscalía omitió esta información para sostener una acusación “infundada” contra su defendido.
Según el defensor, Luciani y Mola hicieron “presunciones caprichosas”, sacaron “conclusiones ilógicas” e “incorporaron a martillazos otros expedientes” para acusar a Lázaro.
“Tomás de Torquemada [inquisidor del siglo XV] estaría más que orgulloso de esta manera de presentar un caso”, dijo el abogado contra los fiscales.
Villanueva insistió en que en el penal de Ezeiza Báez sufrió “amenazas, aprietes y extorsiones”. Argumentó que “le pedían que se arrepintiera para que involucrara a Cristina Kirchner”.
El Tribunal Oral Federal 2, que lleva adelante el juicio de Vialidad, está integrado por Jorge Gorini, Andrés Basso y Rodrigo Giménez Uriburu. Villanueva reservó tres jornadas para responder a las acusaciones de los fiscales Luciani y Mola.
“Legal” y “conveniente”
“Lo que hizo Báez fue apostar al país. Lo que ganó lo reinvirtió”, dijo Villanueva, quien sostuvo que su defendido “apostó por la Patagonia más austral, un lugar históricamente postergado”, y llegó a ser “el principal empleador privado de Santa Cruz”.
“No solo vamos a demostrar que todo lo que hizo Báez fue legal, sino que fue conveniente para el Estado”, insistió el letrado, tras advertir que la acusación tuvo una intención política: “Atacar la gestión del partido político más importante de la Argentina”.
Lázaro Báez está acusado de “asociación ilícita agravada por su calidad de organizador” y de “administración fraudulenta agravada, por haber sido cometida en perjuicio de una administración pública”.
La defensa del empresario también cuestionó a los peritos de la Corte y de la Procuración, quienes dijeron que existieron sobreprecios en las obras analizadas. “Forzaron los resultados para perjudicar a los acusados y lo vamos a demostrar de una manera científica”, dijo el abogado Villanueva.
Báez ya fue condenado a 12 años de prisión por lavado de dinero en otro juicio, un veredicto que está en revisión en la Cámara Federal de Casación, y cumple con arresto domiciliario.