Kicillof acelera la campaña, con recorridas por el interior de la provincia
Quiere instalarse con un estilo cercano y críticas al gobierno de Fernández
LA PLATA.– A un año de los comicios donde se jugará la reelección el gobernador en la provincia de Buenos Aires, Axel Kicillof, pone el pie en el acelerador para salir a hacer campaña. Su plan consiste en mezclarse con mate de por medio entre ciudadanos de los pueblos del interior, dejando atrás los temores generados por el atentado contra la vida de la vicepresidenta Cristina Fernández de Kirchner. Y con un discurso donde pretende diferenciarse de Alberto Fernández.
Kicillof busca el voto de “un sector de la sociedad no tan politizado” y pelea el sufragio con su principal competidor, Diego Santilli, que también está caminando la provincia de manera informal pero constante. En sus discursos en los barrios, Kicillof golpea a la oposición, toma distancia de Alberto Fernández y habla abiertamente de sus promesas de campaña electoral. Recibe aplausos, pero también, críticas y reclamos.
La semana que pasó el mandatario se paró en el monumento del parque Bicentenario, de Olavarría, donde se reunieron unas 300 personas, con poca custodia de civil y mate en mano para prometer: “Nuestro desafío fundamental es recuperar el salario”. Habló de inclusión y distribución -casi como un outsider del actual gobierno-y explicó el plan de seis años que parte de los dos años perdidos por pandemia y se proyecta cuatro años más a partir de su pretendida reelección.
Son reuniones pequeñas, donde no media más de un puñado de custodios vestidos de civil, y que son anticipados el mismo día a los medios dentro de la agenda oficial de gobierno. “La idea es hacerlos de manera periódica”, se reconoció en la Casa de Gobierno de la provincia de Buenos Aires.
Los encuentros cara a cara con los vecinos transcurren mientras Santilli ya camina cada vez con más asiduidad las calles de la provincia. A donde va, el aliado de Horacio Rodríguez Larreta se sienta a criticar al gobernador como un “hombre ausente”.
Kicillof es proclive a suspender las PASO que instauró su propio gobierno. En sus recorridos por el interior Kicillof habla de “rever si el sistema sirve, si se puede mejorar y en que tiempos”. Pero admite que sin acuerdo con la oposición será imposible un cambio.
El gobernador reconoce que los ministros que son intendentes en uso de licencia también saldrán a caminar por sus distritos, en especial en el conurbano. “Veremos en que momento es conveniente que vuelvan a sus distritos”, afirma.
A un año de los comicios, Kicillof asumió la dinámica de salir a ganar voto a voto en el territorio. “No vengo a imponer candidaturas en los distritos”, promete, mientras espera que funcione “el contacto y la piel con los sectores que uno pretende representar”. “Es ahora”, dice el gobernador. Entró en tiempo de descuento.ß