Protestas en EE.UU. tras la difusión de un video de un caso de brutalidad policial
Las imágenes mostraron la agresión de cinco policías a Tyre Nichols, un afroamericano que murió este mes en Memphis
MEMPHIS, Tennessee.– Luego de la difusión del video con la brutal golpiza que terminó en Memphis, Tennessee, en la muerte de Tyre Nichols, un hombre negro de 29 años, ayer se registraron protestas en varias ciudades de Estados Unidos contra un nuevo caso de brutalidad policial.
Cinco oficiales de policía, también negros, fueron imputados con cargos de asesinato en segundo grado por la paliza a Nichols, que murió en un hospital el 10 de enero, tres días después de ser detenido bajo sospecha de conducción imprudente.
La policía de Memphis anunció ayer el “desmantelamiento permanente” de la Unidad Scorpion, a la que pertenecían los agentes, y que había sido creada en 2021 para luchar contra una ola delictiva en la ciudad.
El material en video de las cámaras instaladas en el cuerpo de los policías muestra a un grupo de oficiales que detiene a Nichols y lo intenta derribar usando una pistola inmovilizadora Taser, y luego persiguiéndolo mientras escapa.
En los siguientes segmentos del material –que dura una hora en total y ofrece audio solo en algunas partes–, se ve a Nichols llorando por su madre y gimiendo mientras los policías lo patean repetidamente y lo golpean.
Apenas difundidas las imágenes, el presidente Joe Biden se dijo “indignado y profundamente dolorido”. El mandatario advirtió que el video “indignará a Estados Unidos” y pidió mantener la calma. “Quienes buscan justicia no deberían recurrir a la violencia ni a la destrucción”, añadió.
La muerte de Nichols recuerda a la del también afroestadounidense George Floyd, asesinado por un policía en mayo de 2020 en un incidente cuya filmación enardeció a Estados Unidos. Las marchas contra el racismo y la violencia policial incendiaron el país bajo el lema “Black Lives Matter”.
La noche del viernes y ayer hubo protestas en las ciudades de Memphis, Washington, Nueva York, Filadelfia, Atlanta y otras ciudades, pero todas fueron pacíficas.
En Memphis, unas 50 personas se congregaron anteanoche en un parque céntrico, y posteriormente marcharon por una carretera principal coreando: “Sin justicia no hay paz” y “Diga su nombre: Tyre Nichols”. En un parque de la ciudad, frecuentado por Nichols, se depositaron flores y velas junto a carteles que pedían “Justicia para Tyre”.
La Casa Blanca indicó previamente que altos funcionarios dieron instrucciones a los alcaldes de más de una decena de ciudades en caso de que necesitaran asistencia federal por las protestas.
“Es horrible”
“Cuando mi esposo y yo llegamos al hospital y vi a mi hijo, ya estaba muerto. Lo habían hecho papilla. Tenía moretones por todas partes. Su cabeza estaba hinchada como una sandía”, dijo entre lágrimas Rowvaughn Wells, la madre de Nichols, a la CNN.
La jefa de policía de Memphis, Cerelyn Davis, señaló que las imágenes de la detención del joven por una infracción de tráfico son “iguales o incluso peores” que las de la golpiza a Rodney King en 1991, las cuales provocaron días de disturbios en Los Ángeles que dejaron decenas de muertos. Biden habló con Wells y con el padrastro de Nichols para expresar sus condolencias, informó la Casa Blanca.
“Es horrible ver a cinco tipos grandes golpeando a este hombre”, dijo Nancy Schulte, de 69 años, recepcionista de un hotel de Memphis.
Uno de los abogados de la familia de Nichols, Ben Crump, dio algunos detalles del video anteanoche antes de su difusión. Nichols “llama a su madre tres veces. Sus últimas palabras son: ‘¡Mamá! ¡Mamá! ¡Mamá!’”, dijo junto a Wells, quien bajó la cabeza emocionada. El 7 de enero, policías de Memphis quisieron arrestar a Nichols por una infracción de tráfico. Cuando los oficiales se acercaron, “se produjo un enfrentamiento” y “el sospechoso huyó”, según la policía.
Finalmente, Nichols fue atrapado y arrestado en circunstancias que las autoridades hasta ahora han evitado describir con precisión. Nichols se quejó de los problemas que tenía para respirar durante el arresto y fue hospitalizado. Murió tres días después.
Los cinco policías implicados en los hechos fueron acusados de asesinato y encarcelados. Cuatro de ellos fueron posteriormente liberados bajo fianza. El director del FBI, Christopher Wray, se dijo “horrorizado” y el fiscal general estadounidense, Merrick Garland, anunció que se abrió una investigación federal.
Aunque criticaron el horror de los hechos, los abogados de la familia y los padres del joven agradecieron la “rapidez” de las medidas tomadas contra los agentes.
El reverendo Al Sharpton, un afroestadounidense famoso en la lucha por los derechos civiles, dijo que habló con la familia de Nichols y prevé viajar a Memphis en los próximos días. “El hecho de que estos oficiales de policía sean negros hace que esto sea aún más impactante para nosotros”, señaló.