Máximo pidió un plan de gobierno para evitar “dolores de cabeza”
El jefe de La Cámpora habló tras el “renunciamiento” de Fernández
Máximo Kirchner no estaba anunciado como orador de cierre del plenario que realizó el PJ porteño en el microestadio de Ferro. Sin embargo, el doble jefe de La Cámpora y del PJ bonaerense terminó pisando el escenario para sintetizar el pensamiento del kirchnerismo el día después del “renunciamiento” electoral de Alberto Fernández.
El hijo de la vicepresidenta Cristina Kirchner tuvo discursos más duros, pero igualmente destinó ayer algunos dardos subliminales hacia el Presidente. Por caso, cuando pidió que el Frente de Todos discuta ahora un “programa de gobierno” para evitar “dolores de cabeza” si le tocara ganar las elecciones.
También dedicó la línea final de su discurso a oficializar la convocatoria a un acto que el jueves 27 de abril encabezará Cristina en el Teatro Argentino de La Plata. Tras la declinación de Fernández, los preparativos del acto alimentaron las versiones sobre la posibilidad de que la vicepresidenta anuncie una candidatura. Sin embargo, fuentes kirchneristas aseguraron que “nada de eso” sucederá.
“De cara a lo que viene, tenemos que tener un programa de gobierno inquebrantable para todo el Frente de Todos, para no tener dolores de cabeza después. Debemos establecer un plan con 10, 15 ó 20 puntos de acuerdo y de compromiso de todas las partes del Frente de Todos”, dijo Máximo Kirchner.
A sus espaldas se ubicaron dirigentes porteños como Mariano Recalde; Ofelia Fernández, cercana a Juan Grabois; Daniel Filmus, y los sindicalistas Walter Correa (ministro de Axel Kicillof ) y Daniel Catalano (ATE Capital). También fueron de la partida las legisladoras kirchneristas Paula Penacca y Juliana Di Tullio, entre otros.
Críticas a la ciudad
Una particularidad del discurso de Máximo Kirchner fue que cuestionó en duros términos no solo a la administración porteña de Horacio Rodríguez Larreta, sino también a la ciudad de Buenos Aires en tanto distrito con más recursos per cápita que las provincias.
“De la ciudad de Buenos Aires han salido los intendentes que más daño le han hecho a este país: Mauricio Macri y Fernando de la Rúa. Hay otro que se le está complicando un poco, parece que la presidenta del partido lo trae cortito”, chicaneó en referencia a Larreta y a Patricia Bullrich, rivales por la candidatura presidencial de Juntos por el Cambio (JXC).
El kirchnerismo se encuentra ante un escenario electoral delicado en la ciudad. La aparición de los libertarios de Javier Milei amenaza con desplazarlo del segundo lugar en las preferencias de los porteños. De hecho, dirigentes como Leandro Santoro y Matías Lammens no fueron ayer de la partida en Ferro. Y se diferencian del clásico discurso del kirchnerismo.
Máximo hizo un llamado a los jóvenes que se sienten atraídos por “las ideas de la libertad” y les advirtió que la ausencia del Estado podría perjudicarlos. “Les quiero decir a las personas que honestamente creen en esos postulados que en el océano nada prohíbe al krill comerse a la ballena, pero es la ballena la que se come al krill. Si se miran al espejo y no son una ballena, ya saben cómo les irá”, dijo.
El eje del discurso del primogétino de Cristina Kirchner estuvo referido a la economía y al acuerdo con el Fondo Monetario Internacional (FMI). “Es incumplible. La sequía solo aceleró la comprobación de estos dichos. Se votó un acuerdo incumplible”, reiteró Máximo, y recordó que se apartó de la conducción del bloque de diputados del oficialismo cuando se aprobó el entendimiento, en 2022.
También se quejó de las internas del oficialismo. “Es muy difícil que cada sector del Frente de Todos esté todo el día poniendo en duda su aporte por un lugar más o un lugar menos en las listas. Hace falta reconocer los errores que se cometieron, sentarse a dialogar y juntar los votos para mejorarle la calidad de vida a la gente”, sostuvo.ß