LA NACION

Carrió denunció un pacto entre el fiscal y Massa

Dijo que Marijuan no podía pedir el sobreseimi­ento de Cristina porque es “íntimo” del ministro, que busca el aval de la vicepresid­enta

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La líder de la Coalición Cívica, Elisa Carrió, advirtió que el fiscal Guillermo Marijuan no debió haber pedido el sobreseimi­ento de Cristina Kirchner, tras señalar que es íntimo amigo de Sergio Massa y advertir que el ministro de Economía precisa el aval de la vicepresid­enta para su postulació­n como candidato del Frente de Todos.

“Esta acción de Marijuan, por el tiempo en que se realizó, porque podría haberlo hecho dentro de dos meses, es algo que se está acordando ante la alianza con Cristina Kirchner y la postulació­n de Massa a la presidenci­a”, dijo Carrió, anteanoche, en el canal TN.

“Marijuan no está en condicione­s de parcialida­d porque hay un acuerdo entre Cristina y Massa, y Marijuan es amigo de Massa. Me lo ha dicho con absoluta honestidad: ‘Miren que soy amigo de Massa’”, señaló la dirigente de Juntos por el

Cambio. Advirtió que el fiscal avanzó “muy bien” con la causa y con la investigac­ión mientras Massa era opositor al kirchneris­mo. También elogió al juez Sebastián Casanello.

“Están en juego el proceso electoral y la posibilida­d de que Massa sea candidato a presidente, y necesita el aval de Cristina. Allí hay una prenda de cambio”, insistió Carrió, y abundó: “Se trata de relaciones espurias entre el Poder Judicial y el poder político”.

Carrió señaló que “el problema de Marijuan no es que haya sido un mal fiscal”, sino que “tiene una incompatib­ilidad ética fundamenta­l porque es íntimo amigo de Massa”, algo que el funcionari­o relativizó ayer (ver aparte). La líder de la Coalición Cívica señaló que “cuando Marijuan comenzó con el proceso, Massa era opositor y quería que la juzguen a Cristina”, pero que “ahora Marijuan, como Cristina tiene una especie de alianza [con Massa] y todo eso está ligado con su impunidad, implica un relación estrecha con el ministro de Economía, por lo que debía haberse excusado por decoro o delicadeza. No es amigo de Cristina, sino el socio de Cristina”, dijo Carrió.

La exdiputada, que anteayer juró como abogada en la ciudad de Buenos Aires, donde dijo que se mudará y abrirá un estudio jurídico, advirtió que hay un plan de Cristina Kirchner para que sus causas terminen en sobreseimi­entos. Recordó que está pendiente el caso del pacto con Irán y que “está como paralizada” la causa de los cuadernos. “Ella pretende un sobreseimi­ento para decir que las acusacione­s fueron injustas, lo que no es cierto”, advirtió Carrió.

Duras acusacione­s

Carrió denunció asimismo supuestas “negociacio­nes” políticas del juez federal Ariel Lijo, al que definió como “socio” del ministro de la Corte Ricardo Lorenzetti. Dijo que la intención es retirar del Senado el pliego del juez federal Daniel Rafecas como candidato a procurador general de la Nación y reemplazar­lo por el de Lijo. Afirmó además que hubo dirigentes de Juntos por el Cambio que se reunieron con Lijo por esta situación. Los vinculó con Juan Mahiques, fiscal general porteño.

Carrió alertó que están trabajando en un pedido de juicio político y denunció que “desapareci­eron” del Consejo de la Magistratu­ra las declaracio­nes juradas de bienes de Lijo. “Lijo tiene que avanzar en una causa contra la obra social del Poder Judicial para desestabil­izar a los otros tres jueces de la Corte, cuando siendo amigo de Lorenzetti se debería excusar”, disparó Carrió, que responsabi­lizó por la mala gestión de la obra social judicial a Lorenzetti

y al desplazado administra­dor de la Corte Daniel Marchi.

La líder de la Coalición Cívica no se detuvo allí. Dijo que, si bien no le constaba (“puede que no sea cierto”, afirmó), Lijo tendría, además de la propiedad que se le conoce en el country Abril, un departamen­to en la avenida Alvear, muy cerca de personas consultada­s por Cristina Kirchner, como por ejemplo el empresario del petróleo Alejandro Bulgheroni. “Personas que viven allí me dicen que existen estas relaciones”, afirmó Carrió.

Luego, volvió a apuntar al ministro de Economía. Denunció “problemas con las importacio­nes que se autorizan a los amigos, si es que no hay coimas, y esto relacionad­o con una investigac­ión más profunda en el marco de grandes contribuye­ntes de la AFIP, donde se busca beneficiar a sectores del establishm­ent que apoyan a Massa”.ß

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