Se debilita la actividad económica de China
Pierde fuerza el impulso por el que pasó el país después de la apertura post covid
La economía de China siguió expandiéndose en mayo, aunque lo hizo a menor ritmo, debilitándose el rebote y el impulso que recibió en diciembre último tras la finalización de las restricciones sanitarias por la pandemia de coronavirus, de acuerdo con una encuesta difundida por la Oficina Nacional de Estadísticas (ONE).
La desaceleración manufacturera en China se agravó en mayo ante una débil demanda de consumidores y exportaciones, El dato se sumaba a otros indicios de que la recuperación económica tras la retirada de medidas contra el coronavirus está perdiendo fuerza.
Las autoridades chinas se ven presionadas para proteger la recuperación, después de que un sondeo mostrara que una cifra récord de uno de cada cinco trabajadores jóvenes en ciudades estaba desempleado. El gasto del consumo en abril fue más bajo de lo previsto y la producción fabril cayó respecto al mes anterior.
El Índice de Gerentes de Compra (PMI), emitido cada mes por la agencia nacional de estadística y un grupo industrial, remitió a un 48,4 desde el 49,2 de abril en una escala de 100 puntos. Las cifras por debajo de 50 implican que la actividad ha caído.
El declive “sugiere que el riesgo de una espiral a la baja, especialmente en el sector manufacturero, se está volviendo más real”, indicaron los economistas de Nomura en un reporte.
Los fabricantes chinos se han visto perjudicados por una débil demanda global después de que bancos centrales en Estados Unidos, Europa y Asia subieran las tasas de interés para contener la inflación.
El crecimiento económico se aceleró a un 4,5% respecto al año anterior en los tres meses terminados en marzo, en comparación con el 2,9% del trimestre anterior. Pero el crecimiento tendrá que subir más para alcanzar el objetivo anual “en torno al 5%” marcado por el Partido Comunista, que gobierna el país. El indicador de nuevos pedidos cayó al 48,3 desde el 48,5 de abril en una escala similar de 100 puntos, según la Oficina Nacional de Estadística y la Federación China de Logística y Compras. Un índice de pedidos de exportación cayó a 47,2 respecto al 47,6 del mes anterior.
El sondeo sugería que “la recuperación económica china seguía en marcha en mayo, aunque a un ritmo menor”, señaló Capital Economics en un informe. “La industria está teniendo problemas y el apoyo fiscal a la construcción se reduce. Pero el sector servicios sigue registrando incrementos aceptables”.
Desde hace varios meses la industria china sufre las implicancias de la desaceleración de la economía global en general y la consecuente menor demanda, al ser netamente exportadora. De hecho, las mediciones de la industria del país asiático suelen ser consideradas como insumo a la hora de evaluar la situación de la economía global.
Del mismo modo, se ve afectada por un consumo doméstico que está lejos de su potencial, y que últimamente se vuelca más a los servicios -como el turismo y la gastronomía- que a los bienes.
Las ganancias de las firmas del sector se desplomaron 20,6% anual en el primer cuatrimestre del año, según informó la semana pasada el propio órgano estadístico.
“Los datos débiles subrayan la falta de confianza en el sector privado y refuerzan el caso para que se flexibilice la política, particularmente del lado monetario”, evaluó Chang Shu, economista especializado en Asia. Más allá decisiones monetarias, los expertos consideran que son necesarias otras medidas de estimulo fiscal por parte del gobierno. A principios de este año, Beijing fijó una meta anual de crecimiento de cerca del 5%, una cifra más conservadora de lo que pronostican bancos y organismos internacio na les.ß