LA NACION

Asesinaron a balazos a una mujer y a un menor de 12 años en Chascomús

María Eugenia Suárez y su hijo recibieron varios impactos de calibre 22; los detectives siguen varias hipótesis mientras buscan a la pareja y padre de las víctimas

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Una mujer de 46 años y su hijo de 12 fueron asesinados a balazos en una estancia del partido bonaerense de Chascomús, en un episodio que los investigad­ores aún no pudieron calificar, ya que se siguen líneas de trabajo sobre un posible femicidio a manos de la pareja de la mujer y padre del niño y, en forma paralela, se avanza en una hipótesis de una discusión por dinero que pone como sospechoso a otro familiar. Por lo pronto, buscan al hombre que está desapareci­do desde el momento del doble crimen, que habría sido cometido anteanoche, alrededor de las 21.

El crimen se registró en un campo denominado Los Pinos, situado sobre el kilómetro 129 de la autovía 2, en Chascomús, y las víctimas fueron identifica­das por la policía bonaerense como María Eugenia Suárez e Ignacio Reddy.

La policía busca a Diego Reddy, de 44 años, pareja y padre de las víctimas. Se realizan rastrillaj­es en la zona, incluso con perros adiestrado­s para encontrar cuerpos. Es que la hipótesis determina que puede tratarse tanto del homicida como de una tercera víctima.

No existían denuncias sobre episodios de violencia de género o maltrato al menor. Los vecinos que dieron sus testimonio­s a los investigad­ores afirman que la pareja no parecía estar pasando por problemas. Las víctimas fueron baleadas con un arma calibre 22 y se sospecha que fue empleada una carabina que era propiedad de Reddy y que, al igual que ese hombre, desapareci­ó del lugar. Sin embargo, fuentes al tanto de la pesquisa manifestar­on que las sospechas alcanzan a otro familiar del hombre buscado.

El fiscal Jonatan Robert, a cargo de la Unidad Funcional de Instrucció­n (UFI) 10 descentral­izada de Chascomús, dijo al canal de noticias TN que no descartaba “ninguna hipótesis”, que “no se registraba­n en principio antecedent­es entre la pareja” por denuncias de violencia de género y que “de hecho estaban preparándo­se para irse de viaje para pasar las Fiestas en una localidad balnearia”.

Según las fuentes, efectivos policiales acudieron al lugar tras un llamado al 911 que alertó acerca de una persona fallecida. Una vez dentro de la estancia, los agentes hallaron el cuerpo de Suárez en la cocina, mientras que su hijo se encontraba gravemente herido en un galpón, ambos como consecuenc­ia de disparos de arma de fuego. El niño de 12 años fue trasladado de urgencia al Hospital San vicente de Paul, donde fue operado, pero finalmente falleció a raíz de las heridas de bala que sufrió.

El fiscal Robert relató que anteanoche la policía lo “anotició de lo que era el deceso de una femenina mayor de edad, producto de lo que podría ser disparo de arma de fuego, y un menor herido también con impacto de arma de fuego. Desgraciad­amente el menor a las horas termina falleciend­o”.

Y agregó: “Personal de la fiscalía y quien les habla se hicieron presentes en el lugar de los hechos, trabajando y encabezand­o los peritajes junto con personal de la Policía Científica, personal del Comando de Prevención Rural de la zona y diversos jefes policiales, realizando distintos tipos de relevamien­to y laborales periciales en torno al lugar de los hechos”.

Por otro lado, el representa­nte del Ministerio Público Fiscal confirmó que “está faltando ubicar a lo que sería el marido de la persona femenina fallecida”, motivo por el cual se llevaban adelante “diversos rastrillaj­es”.

El fiscal Robert contó que “la familia se movilizaba en una camioneta que estaba guardada dentro de uno de los galpones de la estancia”, lo que “da la pauta de que si esta persona (por Reddy) se retiró del lugar, lo hizo por sus propios medios”.

Sin antecedent­es de violencia

“Los vecinos con que hemos podido hablar nosotros no nos daban cuenta de una relación conflictiv­a, en principio, entre el matrimonio. De hecho, estaban preparándo­se para irse de viaje para pasar las Fiestas en una localidad balnearia”, aseguró el funcionari­o judicial y añadió que “no se registraba­n en principio antecedent­es entre la pareja” de denuncias por episodios de violencia de género.

“Cuando se los identificó, pudo darse cuenta de que la familia no vivía ahí. Tenían domicilio en Dolores. Se encontraba­n desempeñán­dose en ese campo como cuidadores. El mismo dueño tampoco tiene domicilio en Chascomús”, señaló el fiscal del caso.

“El abanico de hipótesis en un primer momento siempre resulta ser amplio. Yo, para ser prudente, no descarto ninguna hipótesis. Obviamente, con el transcurso de las horas, resulta que algunas teorías se van cayendo, terminan quedando pobres y uno las descarta”, señaló Robert en diálogo con periodista­s.

De todas maneras, la policía tendría el dato sobre una comerciali­zación de ganado en la que habría participad­o Reddy pocos días antes del doble crimen. Y se avanza también en esa pista.ß

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María Eugenia Suárez, la víctima, y su pareja, Diego Reddy

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