Anticipan que el primer bimestre del año cerró con superávit
El ajuste aplicado en el gasto jubilatorio y los impuestos ligados al comercio exterior, las claves; traspié financiero en febrero
El ministro de Economía, Luis Caputo, cumplió en febrero su meta de mantener las cuentas del Estado “en orden”, al obtener un superávit financiero acumulado en el primer bimestre.
El dato surge del análisis de la Ejecución Presupuestaria de la Administración Nacional, que publicó la Oficina de Presupuesto del Congreso (OPC), que da cuenta de un fuerte ajuste en jubilaciones, transferencias a provincias, obra pública y subsidios en el período.
De acuerdo con la OPC, el Tesoro logró al equilibrio de las cuentas tras una fuerte caída del gasto en febrero del 32,8% en términos reales, mientras que los ingresos se mantuvieron casi constantes, con un crecimiento de apenas 2,5% en el mes.
En detalle, los ingresos de la administración nacional alcanzaron los $10,7 billones en los dos primeros meses del año, un crecimiento acumulado de apenas 0,4%, pese a la fuerte caída de la actividad económica.estosedebióaquelosingresosimpositivos crecieron 15,2% interanual, gracias al crecimiento del impuesto PAIS, cuya recaudación se disparó 406%, debido a la suba de la alícuota, a la ampliación de la base imponible y a la devaluación de la moneda.
También crecieron los ingresos reales por derechos de exportación (71%) y el impuesto al valor agregado (15,4%). En sentido contrario, cayó la recaudación interanual del impuesto a las ganancias (-36,5%) y los recursos provenientes de la Seguridad Social (-25,1%), dos elementos que son coparticipables, a diferencia del impuesto PAIS y las retenciones.
Los gastos primarios, por su parte, fueron $7,2 billones en el bimestre. Con excepción de los otros gastos corrientes, que crecieron 31,9%, por las transferencias a hospitales nacionales, todos los conceptos mostraron disminuciones reales en la comparación interanual, dijo la OPC.
Las caídas más significativas en los dos primeros meses del año se observaron en los gastos de capital (obra pública), que cayeron 82,4% interanual, en las transferencias corrientes a provincias (-73%) y en los subsidios energéticos (-59,5%).
Las erogaciones destinadas a pagar jubilaciones y pensiones se redujeron 33% en términos reales y, dada su participación en la estructura del gasto total del sector público nacional, fueron las que más contribuyeron a la reducción total.
Un traspié
Como consecuencia del incremento reflejado en el pago de los intereses de la deuda (34,2%), los gastos totales disminuyeron en una magnitud menor a la de los gastos primarios (-23,8%), alcanzando un total de $9,7 billones. De hecho, en febrero hubo déficit financiero $93.5000 millones, aunque el bimestre se mantuvo en terreno positivo. La OPC aclaró que el pago de intereses de la deuda fue estacionalmente alto en febrero.
En el bimestre, el resultado primario (no incluye el pago de los intereses de la deuda) alcanzó $3,48 millones, lo que contrasta con el déficit registrado un año atrás. En tanto, el resultado económico fue superavitario en $1,1 billones, detalló la OPC.
“Si bien los resultados fiscales de febrero empeoran respecto de los obtenidos en enero, por el efecto conjunto de estacionalidad y nivel de actividad en los recursos, junto con una baja registración de gastos en el primer mes del año, los resultados positivos acumulados en el bimestre (primario y financiero) se sitúan en niveles superiores al promedio de una serie de 15 años en el caso del resultado financiero y en el máximo nivel de la misma en el caso del resultado primario”, agregó.ß