La relación de Milei con China suma un nuevo paso en falso y acumula tensiones
La embajada de ese país negó la llegada con retraso de 30 camiones para combatir el Covid, como dijo Adorni; se agregan molestias por la paralización de represas en Santa Cruz
“No afecta en absolutamente nada. Tenemos en claro cada uno de los puntos de nuestra relación con el mundo, y no entiendo por qué esto podría afectar nuestra relación”. Así respondía el portavoz Manuel Adorni, en conferencia de prensa y cuando la nacion lo consultó sobre la parálisis en la construcción de las represas Jorge Cepernic y Néstor Kirchner, que días atrás desembocó en el despido de 1.800 operarios de esas megaplantas, que en conjunto suponen la obra civil más importante de China en la región.
Más allá de los paños fríos que intentó poner el portavoz oficial, y en el contexto de una relación áspera desde que Javier Milei asumiera en la Casa Rosada, la preocupación de China por el retraso en las obras es sutil pero palpable, y obligó a la Cancillería a dar una serie de gestos para calmar al gigante asiático, mientras sigue congelada, a pesar del pedido presidencial, la utilización del segundo tramo del swap de monedas, acordado con China por el gobierno de Alberto Fernández.
Por si faltaba algo para complicar el vínculo, la embajada de China en Argentina contestó en las últimas horas unas declaraciones de Adorni, quien aseguró que 30 camiones enviados desde China habían llegado al país “para combatir el Covid” y encima “algo retrasados”.
La sede diplomática contestó que se trataba de “información completamente incorrecta”, y que los camiones “son instalaciones logísticas de hospitales móviles de asistencia gratuita de parte del Ministerio de Defensa Nacional de la República Popular China para la Argentina”. También indicaron que el Ministerio de Defensa que encabeza Luis Petri conocía el contenido de esos envíos.
Inquietud por las represas
El martes pasado, el embajador de China en el país, Wang Wei, recibió en su residencia, frente al Parque Sarmiento, a la ex gobernadora de Santa Cruz, Alicia Kirchner. La ex gobernadora, hoy senadora, se encargó de publicitar el encuentro, en el que habló de la “incertidumbre
laboral de los trabajadores de represas”, y recordó que los avances en las obras venían muy retrasados: está terminado el 45% en la represa Cepernic, solo el 20% en la Néstor Kirchner, y un escaso 7% de la línea de Extra Alta Tensión.
El diplomático reclamó, como lo hace China en privado, que el Gobierno acelere la firma de la denominada adenda 12, una voluminosa serie de estudios geológicos y de factibilidad, “que permitirá contar con los fondos necesarios para continuar las obras” explicó la hermana del fallecido Néstor Kirchner.
La Secretaría de Energía, a cargo de Eduardo Javier Rodríguez Chirillo, fue sindicada en la conversación como la responsable de que esa adenda no se halla firmado hasta ahora, aunque las negociaciones entre el Gobierno y las empresas constructoras continúan. Sin la adenda, no hay fondos para continuar con la obra, que cuando esté en funciones le devolverá a China los miles de millones invertidos.
En la misma línea de preocupación llegó a la Casa Rosada el gobernador de Santa Cruz, Claudio Vidal, que a pesar de haber desalojado del poder al kirchnerismo sostuvo el miércoles el mismo reclamo ante el ministro del Interior, Guillermo Francos. Cerca de ambos dirigentes reconocieron que las represas santacruceñas fueron parte del diálogo, y que el ministro-fiel a su estilo dialoguista-se comprometió a dar pasos en ese sentido. En relación con los despidos, en la gobernación santacruceña recordaron que el Gobierno no dictó la conciliación obligatoria, como sí lo hizo la provincia, pero la UTE que maneja las obras (mayoritariamente de capitales chinos a través de la empresa Gezhouba) no lo aceptó.
En la Cancillería, y atentos a la molestia de China, confirmaron por lo bajo que la ministra Diana Mondino -actualmente de viaje por el sudeste asiático- ya reservó la última semana de abril para emprender un viaje a la tierra gobernada por el presidente Xi Jinping, deseosa de disipar dudas y resquemores. No ayudó, según fuentes diplomáticas, que Mondino haya realizado un viaje de diez días por la zona, incluido Japón, rival histórico de China.
Mientras el diplomático de carrera Marcelo Suárez Salvia ya cumple funciones como embajador en Beijing, fuentes diplomáticas aseguraron que en la Cancillería también decidieron el desplazamiento de Gustavo Girado, consejero durante la gestión de Sabino Vaca Narvaja, identificado con el kirchnerismo, en la embajada. Suena para ir a China como representante adicional el sinólogo y catedrático Jorge Malena, de buenos vínculos con la vicepresidenta Victoria Villarruel, aunque allegados al propio Malena dijeron desconocer la versión.