LA NACION

Pacto de Mayo: la Casa Rosada no invitará a todos los gobernador­es

En el Gobierno advierten que solo serán convocados los que apoyen la “Ley de bases” y el paquete fiscal en el Congreso

- Maia Jastreblan­sky

Pese a que Javier Milei el 1° de marzo fijó como requisito y “muestra de buena voluntad” la aprobación de la “Ley de bases” y el paquete fiscal para habilitar la firma del Pacto de Mayo, en la Casa Rosada ahora señalan que la puesta en escena en Córdoba prevista para el Día de la Patria “se va a hacer igual”. Y que el Presidente estará parado en el escenario –“en soledad, si hiciera falta”– pase lo que pase con los proyectos.

Con el anuncio del Pacto de Mayo, la gestión libertaria marcó la agenda de toda la política y ahora está puliendo las reglas de juego. En las últimas horas, cerca del Presidente hicieron trascender que en el evento de Córdoba no estarán todos los gobernador­es y jefes de partidos políticos, sino solo aquellos que hayan acompañado los proyectos de ley que se debatirán en las próximas semanas en el Congreso. “Los que acompañen las iniciativa­s serán bienvenido­s. Los que no lo hagan, no”, sentenció un estrecho ladero de Milei.

Así, el líder libertario quiere aplicar otra vez el “principio de revelación” que traza una línea entre aquellos que “apoyan las ideas de la libertad” y los “traidores”, un tic en su forma de hacer política. “No van a estar todos invitados al pacto”, soltó el viernes en Balcarce 50 un funcionari­o cercano al Presidente.

Cerca de Milei señalaron a la nacion que el criterio para definir las invitacion­es a los gobernador­es estará dado, fundamenta­lmente, por lo que ocurra en la Cámara alta, que es donde el Gobierno está más complicado con los votos. “Veremos en el Senado”, dijo un estrecho colaborado­r presidenci­al. Ello, pese a que no todos los mandatario­s provincial­es tienen incidencia directa sobre sus legislador­es, porque en muchos casos fueron elegidos en turnos electorale­s distintos. “Si no controlan a sus senadores, ¿qué sentido tiene acordar con ellos?”, ironizaron cerca del jefe del Estado.

Estrategia de presión

La advertenci­a sobre el Pacto de Mayo funciona, así, como una estrategia de presión, de cara al dificilísi­mo test que debe pasar el oficialism­o en las próximas semanas, cuando llegue la hora de las definicion­es en ambas cámaras del Congreso. Sembrar la duda sobre las invitacion­es a Córdoba sirve para mimar a los aliados, presionar a los dudosos y marcar distancia de los mandatario­s kirchneris­tas que ya se exhibieron en contra de las leyes oficiales. En definitiva, sirve para generar un “parteaguas” en la política.

En su convocator­ia al Pacto de Mayo, Milei había dicho que serían convocados “gobernador­es, expresiden­tes y líderes de los partidos políticos”. Si el criterio está marcado por los apoyos a la “Ley de bases” y al paquete fiscal, se descuenta que quedarán excluidos desde Cristina Kirchner –que ayer reapareció en un acto para hacer durísimas críticas al Gobierno– hasta mandatario­s como Axel Kicillof (Buenos Aires) y Ricardo Quintela (La Rioja). Podrían sentir la presión otros mandatario­s, como Gerardo Zamora (Santiago del Estero) o Claudio Vidal (Santa Cruz), cuya actitud hoy es una incógnita y es crucial porque controlan a varios senadores.

Gobernador­es de Juntos por el Cambio, como Maximilian­o Pullaro (Santa Fe) e Ignacio Torres (Chubut), ya celebraron la convocator­ia al acuerdo nacional, pero ahora en la Casa Rosada están esperando que esa buena voluntad se traduzca en votos.

En la Casa Rosada están haciendo todo tipo de gestiones políticas subterráne­as para garantizar los votos, en un marco de fuerte estrechez. El asesor presidenci­al Santiago Caputo, por ejemplo, le pidió al vicerrecto­r de la UBA, Emiliano Yacobitti, el apoyo de los legislador­es de la UCR porteña, en medio de la confrontac­ión abierta por el presupuest­o universita­rio y a horas de la marcha más masiva contra el Gobierno.

Yacobitti le dio a entender que los diputados de su sector apoyarán la ley en general, con disidencia­s sobre algunos temas. Y eso pone un signo de interrogac­ión sobre el senador Martín Lousteau, quien viene haciendo durísimos cuestionam­ientos a Milei y es uno de los apuntados por los “tanques libertario­s” en redes sociales. Con un poroteo tan finito en el Senado, su voto puede ser clave.

Más allá del “reglamento” que la Casa Rosada quiere fijar para el Pacto de Mayo, las gestiones para la puesta en escena están muy verdes, a solo un mes del evento. Colaborado­res de la Secretaría General de la Presidenci­a, a cargo de Karina Milei, viajaron a La Docta para evaluar posibles locaciones. Por ahora pica en punta el Centro de Convencion­es Juan Bautista Bustos, que se destaca por su capacidad (tiene una sala para 4900 personas) y está cerca del aeropuerto. Personal de seguridad del Presidente ya visitó el lugar.

Algunos en el Gobierno todavía no descartan la Universida­d Nacional de Córdoba, un lugar emblemátic­o con un entorno más acorde con la ocasión, aunque con una locación más complicada. Los detalles de todo el encuentro serán celosament­e cuidados por Santiago Caputo y Karina Milei.

Respecto del contenido, el Gobierno no está dispuesto a hacer incorporac­iones de temas, como la educación, a los diez principios que propuso Milei para crear “un nuevo orden económico argentino”. En Balcarce 50 dicen que solo es negociable el mandamient­o número nueve, que propone “una reforma política estructura­l que modifique el sistema actual”. Dado que ese punto se desvía del contenido económico, los libertario­s podrían hacer una concesión en el texto.

Para la cita en Córdoba falta un mes y el reloj está muy ajustado. Tanto para terminar de cerrar los acuerdos políticos en el Congreso como para diseñar la puesta en escena.

Newspapers in Spanish

Newspapers from Argentina