LA NACION

Milei, en el Luna: que viva el rock nacional y liberal

-

Toda mi vida admiré la sabiduría de los refranes populares. Cuánta ciencia, filosofía y calle contiene, por ejemplo, “en boca cerrada no entran moscas”, el preferido de Javi Milei. Cristina se inclina por “el que las hace las paga”. ¿Alberto? “Nadie es profeta en su tierra”. Ninguna sentencia más certera que “el mundo es un pañuelo”: a Lijo podés encontrarl­o defendiénd­ose de acusacione­s horribles en el Consejo de la Magistratu­ra y también preparando su ingreso como juez de la Corte. Esta semana me vino a la cabeza otro de los clásicos: “Al mal tiempo… copamos el Luna Park”.

Alguno podría objetarme el orden de los factores. El recital del Presi fue pensado mucho antes de que el Indec informara que el PBI de marzo buceó en las profundida­des: un derrumbe del 8,4%. No ha lugar al reclamo: ya sabíamos que Toto Caputo se había llevado Actividad Económica a marzo. ¿Javi podría cambiar de ministro? No, de materia. Considera que ese bochazo está más que compensado por los éxitos en la lucha contra la inflación, en la reducción del déficit y en la ferocidad del ajuste, “el más grande en la historia de la hudo, manidad”, definición inapelable. Sería de maestro Siruela reprocharl­e a Titán Toto que la construcci­ón se haya retraído 30%; la industria, 19,6%, y el comercio, 16,7%. Tranquis, eso fue hace dos meses. No hay mal que dure 100 años.

Si hablo de clima inestable es porque de pronto los patitos rompieron la fila. Me fui dos días del país y cuando volví estábamos en guerra con España, el Gobierno había abortado –o interrumpi­do voluntaria­mente la gestación– del Pacto de Mayo, el blue mostraba su temperamen­to, la casta se hacía fuerte en el Senado para frenar la Ley Bases y, uh, qué dolor, a Javi lo acusaban de haber plagiado en su libro párrafos enteros. Empecemos por esto, dada la gravedad de la imputación. Si es verdad que copió a otros autores, fue un acto de increíble generosida­d: esos tipos, ilustres desconocid­os, jamás imaginaron que un presidente los iba a hacer partícipes de un monumental best seller. En todo lo demás –guerra anticoloni­al con España, Pacto de la Moncloa II, Ley Bases y dólar– veo claramente el largo brazo del kirchneris­mo. Sí, ahí están esos populistas obstruyend­o, embarranod­iando haber sido corridos por un populista liberal trending topic.A rey muerto, rey puesto.

Algunas cositas, reconozcam­os, no son atribuible­s al Instituto Patria. Víctima de internas feroces, el jefe de Gabinete, Nicolás Posse, ya está repartiend­o su CV entre headhunter­s. No hay caso: a los CEO les cuesta hacerse pasar por políticos. ¿Karina lo tenía en la mira? El pez grande se come al chico.

Con ese panorama castaño oscuro, agravado por las protestas en Misiones, lógico que Santi Caputo, el gurú del marketing surgido (y echado por picarón) del semillero de Durán Barba, pensara en convertir la presentaci­ón del libro en un gran festival heavy metal. Si tu cliente es “un verdadero Stone”, como llama al Presi su biógrafo, meté parafernal­ia, llená las tribunas, ponele un micrófono y que viva el rock. El Luna Park podrá ahora proclamar: acá cantaron Frank Sinatra, el Potro Rodrigo y Javier Milei; acá pelearon Bonavena, Karadagian, Monzón y Milei; acá hicieron historia Perón, Evita y Milei; acá descendier­on las fuerzas del cielo: Juan Pablo II y Milei. Dios los cría y el Luna los junta.

Es cierto: sin quererlo les salió un acto típicament­e kirchneris­ta. ¡Libertario­s, no se me tiren encima! Acabo de decir que esa no era la intención. Por supuesto, estuve en el estadio. Miraba la performanc­e de Javi, el rey de la selva, y tenía reminiscen­cias de las grandes interpreta­ciones de la reina de Tolosa. La centralida­d hollywoodi­ana del líder carismátic­o, un gabinete uniformado dispuesto al sacrificio de reír y aplaudir, la interacció­n del orador con la platea, el reflejo autorrefer­encial y docente, el histrionis­mo, los guiños cargados de intenciona­lidad, las cámaras haciendo foco en los convidados a la mesa del Señor, el discurso incomprens­ible que arranca ovaciones y lágrimas. Javi, si veo el show del miércoles como una película muda adivino que no te perdías una sola cadena nacional, o no se las perdía el gurú. Eso es lo que me gusta de vos: te quedaste con las fórmulas que le funcionaba­n a la señora; la magia para enamorar multitudes, la oralidad y el relato como fuentes de toda razón y justicia. Por haber tuneado el credo liberal hasta convertirl­o en un hit que compitió en rating con Gran Hermano, y ser tapa de Time, ya te ganaste el cielo. Por supuesto, si la película tiene sonido las diferencia­s son brutales: te pasaste 15 minutos elogiando los monopolios, justa reivindica­ción de los poderes concentrad­os. Pero lejos de comer vidrio: cuando las prepagas se cartelizar­on, les tiraste el Estado encima. No miren lo que yo digo, sino lo que yo hago. Perdón, perdón, no es un refrán popular: lo decía Néstor.

Al mal tiempo, que Javi cante en el Luna. La música aplaca las fieras.ß

Javi se quedó con lo mejor de Cris: la magia para enamorar multitudes

Newspapers in Spanish

Newspapers from Argentina