Es crítica la situación de las bibliotecas populares
“Siempre imaginé que el Paraíso sería algún tipo de biblioteca”, escribió Jorge Luis Borges.
Mario Minervino
Con deudas de entre tres y seis meses, las bibliotecas populares de la ciudad terminan el año sin haber logrado que la Provincia se ponga al día con el pago de las subvenciones que establece la ley que rige su funcionamiento.
Hoy el Estado adeuda entre tres y seis meses de un dinero que mayoritariamente se destina al pago del personal bibliotecario.
Para dar un idea de esa demora en los pagos, basta señalar que los aportes correspondientes a los meses de enero, febrero, marzo, abril y mayo de este año fueron depositados recién en julio.
En la actualidad algunas instituciones han percibido los montos correspondientes a junio y julio, mientras que casi la totalidad no ha cobrado desde entonces.
La semana pasada hubo una manifestación en La Plata por parte de la Federación de Bibliotecas Populares, que incluyó un corte de tránsito en la céntrica esquina de 5 y 47, ante el área de Gestión Cultural provincial, reclamando el pago de una deuda que se mantiene con todas las entidades del territorio bonaerense.
Los dirigentes aseguraron que "500 bibliotecas de la provincia están en riesgo por falta de una gestión cultural a la altura de los tiempos. Se trata de espacios de ayuda comunitaria que necesitan un urgente auxilio por parte de las autoridades”.
En la actualidad la Provincia entrega 8.481 pesos cada mes, que, de acuerdo a la Ley provincial 14.777, debiera cu- brir el sueldo del bibliotecario responsable de la institución.
"El aporte es bajo y resulta muy complicado afrontar únicamente con ese aporte el funcionamiento de este tipo de servicios", señalaron a
desde la biblioteca Pajarita de Papel, que funciona en dependencias del ex Hotel de Inmigrantes de Saavedra y Luiggi.
La encargada del lugar mencionó como una curiosidad que la Provincia envia conceptuosos mensajes para el Día de la Biblioteca o del Bibliotecario, destacando la función social de estas entidades.
"En esos momentos destacan la vital importancia de nuestro funcionamiento, pero después se olvidan de nosotros y tenemos que hacer enormes esfuerzos para sostenernos", reflexionó.
En este caso, la biblioteca funciona exclusivamente para préstamos de libros infantiles, con una importante demanda.
"No es verdad que los chicos no leen, al contrario", indican.
La biblioteca Eduardo Mallea, de Villa Rosas, también atraviesa una situación delicada. Los últimos meses se ha mantenido merced al aporte que realizan los integrantes de la comisión, tanto para afrontar el pago de sueldos como los servicios.
"La vamos zafando", explicó en términos coloquiales el responsable del lugar. En este caso además de préstamos de libros, la entidad desarrolla talleres, facilita el uso de computadoras y varias otras actividades.
Por último, la actividad de la biblioteca Gabriel Mistral, de Villa Nocito, se mantiene "gracias a la voluntad y la vocación de las bibliotecarias", quienes suelen compartir un único sueldo y esperan que vaya llegando el dinero.
"Esto se sostiene con un gran esfuerzo, porque además en nuestro caso hacemos tareas de apoyo escolar,
Nueva. La
manualidades, cursos de inglés y mantenemos abierto durante el verano", indicó una empleada.
Hecha la ley...
La ley, que poco se respeta, tiene el fin de garantizar a to- dos sus habitantes el derecho a la lectura y al acceso a la información, formación y recreación. Las Bibliotecas gozarán de beneficios como subvención mensual y permanente, destinada a solventar los gastos de funcionamiento, etc.
Los aportes correspondientes a enero , febrero, marzo, abril y mayo recién fueron depositados por el gobierno provincial en julio.