Patagones y Guaminí, con dificultades
Uno de los distritos con menores avances en materia de infraestructura de procesamiento de residuos es Patagones.
No hay una sola planta de tratamiento y, salvo en la localidad de Juan A. Pradere (que envía su basura a la planta de Pedro Luro, partido de Villarino), en todas las localidades los residuos van a parar a fosas en basurales a cielo abierto.
“No contamos con planta de reciclado -refirió a La Nueva.
Guido Bergandi, sub- secretario de Servicios Públicos y Urbanos-. Se hicieron intentos en años anteriores, pero no llegaron a buen puerto”.
Tampoco hay separación de residuos.
“Cuando asumimos, en el basural de Carmen de Patagones se estaba intentado hacer separación pero la verdad que por falta de infraestructura era una complicación y se dejó de hacer”, reconoció.
El dato positivo es que hay planes con la vecina ciudad de Viedma para implementar -en conjunto- el programa ambiental GIRSU (Gestión Integral de Residuos Sólidos Urbanos).
El acuerdo implicará el traslado del basurero ubicado en Celedonio Miguel a la zona noreste de la ciudad.
Guaminí también está teniendo dificultades para tratar sus residuos, pero en este caso por culpa de otro factor: la inundación.
“Tenemos tres plantas de reciclado en Garré, Casbas y Guaminí, aunque esta última no está terminada en su totalidad. La única localidad grande que no tiene una es Bonifacio. El problema es que ninguna está a pleno por la crisis hídrica”, reconoció el director de Medio Ambiente, Miguel Gerez.
“Las plantas tienen problemas de anegamientos, lo que complica el acopio de basura que no es tratada. Como las cavas están con mucha agua, hoy esa basura compactada se está ubicando a un costado de la planta”, describió.