Crece la incertidumbre con los planes de autos 0 Km
Desde el sector automotor reconocen el embate de la crisis y todavía no hay certezas sobre el futuro.
El dólar subió y automáticamente el valor de los vehículos hizo lo propio, en algunos casos hasta en un 20 por ciento. Pero más allá de un mercado que está notoriamente a la baja –-se espera del 20% en septiembre--, la incertidumbre por estas semanas pasa por saber qué sucederá con aquellas unidades recientemente -–o a punto de ser-- entregadas y que se abonan hasta en 84 cuotas.
Al respecto, el presidente de Acara Bahía Blanca (Asociación de Concesionarios de Automotores de la República Argentina), Luis Gallego, explicó que “la realidad es que para la gente que retiró el auto es un problema, lo que nos tiene luchando a los concesionarios en pos de cuidar a nuestros clientes”.
“La idea es que las terminales transfieran de alguna manera los aumentos hacia adelante, como se hace con los créditos UVA, ya sea aumentando la cantidad de cuotas o difiriendo las que falta abonar. Porque si no, va a haber mucha mora”, agregó Gallego.
Según el experimentado empresario, lo más complicado de la situación actual es que para las terminales no será fácil absorber el impacto porque ellas también atraviesan conflictos económicos.
“Hay reuniones permanentes para ver cómo se sale de esto, pero no es fácil, porque para financiar a los clientes alguien tiene que poner la plata y que lo hagan las fábricas no es viable”.
Respecto a amortiguar el golpe, Gallego destacó que hoy por hoy son las concesionarias las que están ofreciendo bonificaciones -–de hasta 160 mil pesos en el caso de su concesionaria--.
“Las estamos haciendo nosotros porque necesitamos hacer caja, pagar impuestos, sueldos, servicios y los autos que tenemos comprados a la fábrica, donde los costos de intereses rondan el 80%”.
Mal cierre de año
En momentos de crisis co- mo el actual, una de las variables que suele resultar más perjudicada es el trabajador, y desde el sector automotor ya anticipan que en un malo año como este y de peor pronóstico para 2019, las concesionarias cuentan con una estructura superior a la necesaria.
“La venta convencional cayó muchísimo, disminuye todos los meses. A nivel nacional se pasó de las 83.000 unidades vendidas en mayo a 64.000 en junio, 67.000 en julio y 65.500 en agosto, mientras que para septiembre se espera entre 50.000 y 52.000, es decir una baja del 20% para este mes. Hablando del interanual, la caída es del 25%”, lamentó Gallego.
“Alguna concesionaria ha cerrado y otras están reduciendo el personal. Lo que pasa es que mientras que nosotros estamos preparados para 1.000.000 de autos en el país, ya se está hablando de que este año va a terminar con 800.000 y el 2019 con 700.000. Eso quiere decir que las concesionarias no van a poder sostener las plantas actuales de personal”, explicó el delegado local de Acara.