La Nueva Domingo

El cuidado de la salud de los chicos en vacaciones de invierno.

La realidad es que aumenta la exposición a alimentos ricos en grasas y azúcares, además de las horas sin actividad física.

-

Usar las frutas frescas en todas las comidas, como colación y para acompañar el desayuno. Tenerlas a disposició­n en los paseos.

Empezaron las vacaciones de invierno, muy esperadas por los chicos para tener días libres, descansar, jugar y compartir tiempo con amigos. Las vacaciones son el momento para salir de la rutina. No hay que levantarse temprano, ni pensar en tener listo el uniforme o el guardapolv­o, ni en la comida para las viandas; aunque muchas veces somos los padres los que nos volvemos locos por querer ocupar ese tiempo con las mil y unas actividade­s para que los chicos no se aburran, olvidándon­os que el descanso y el ocio también son importante­s y saludables, para ellos y nosotros.

Otra realidad en las vacaciones es que aumenta la exposición a alimentos ricos en grasas y azúcares, además de las horas sentados en el sillón frente a las pantallas y en muchos casos disminuye la actividad física. El tiempo libre y las bajas temperatur­as invitan a generar esta situación y muchas veces es difícil resistirse.

Además, solemos relacionar el momento de descanso a los placeres culinarios, y esos suelen venir de la mano del consumo de aquellos alimentos que de- berían ser de consumo opcional, pero en las vacaciones se vuelven de consumo diario.

En las meriendas y colaciones solemos observar grandes cantidades de galletitas, snacks salados, golosinas, chocolates, alfajores, aumentando así el consumo de grasas, azúcar, sodio y conservant­es.

Por otro lado, en almuerzos y cenas abundan los guisos, pastas, comidas calientes con mucho contenido de carnes y cereales y poco contenido de verduras. Solemos relacionar las frutas y verduras con el verano, lo que hace que en invierno disminuyam­os su consumo.

Entonces, ¿cómo podemos hacer para cuidar la salud de los chicos durante las vacaciones de invierno?

* Usar el tiempo necesario para descansar. El descanso y el ocio hacen una vida saludable. No debemos confundir el ocio con el sedentaris­mo, y debemos intentar sumarle horas de movimiento a estos minutos de distensión.

* Aprovechar el tiempo en familia para hacer actividade­s que durante el año no podemos hacer por falta de tiempo: paseos a lugares turísticos, recorridas en bicicletas. También se pueden organizar juegos en casa.

* Elegir recetas para cocinar en familia. Llenar la heladera, alacena y la casa de alimentos saludables, caseros y hechos con los chicos. Preparar budines de frutas y verduras de estación, dips de diferentes alimentos para comer como snacks con verduras (hummus, palta, dip de zanahoria, de calabaza). La planificac­ión, las compras organizada­s y en familia nos ayudan a tener una casa segura, con alimentos saludables a disposició­n para los momentos de ingestas.

* Si vamos al cine o al teatro y compramos algo para comer, no optar por las porciones extra grandes sino moderadas. Llevar bolsitas y dividir el balde de pochoclos entre todos o comprar la porción individual, es de gran ayuda. Preferente­mente elegir bebidas sin azúcar y pequeñas.

* Limitar el uso de pantallas reducirá las horas de sedentaris­mo y la exposición a alimentos ricos en azúcares y grasas. Usar las horas sin pantalla y en las que los chicos no puedan estar al aire libre o en movimiento para los juegos de mesa, de ingenio, de pensar que aunque tienen a los chicos sentados, los mantiene activos, con el pensamient­o y la cabeza en acción.

Al pensar un programa para hacer en familia, que la comida no sea el eje central, sino que acompañe. Por ejemplo: que la salida no sea ir a merendar o tomar un helado, sino ir a la plaza o andar en bici y luego se puede merendar en casa o afuera. Pero si centramos el programa en la comida vamos a encontrar el placer en eso y no en disfrutar de lo que estamos.

Además, el invierno y el frío vienen acompañado­s de resfríos, alergias, gripes y enfermedad­es que afectan nuestro estado de ánimo. El consumo de frutas y verduras nos aporta vitaminas y minerales que nos ayuda a mantener las defensas altas y disminuir la probabilid­ad de enfermarno­s.

 ??  ??
 ?? ARCHIVO LA NUEVA. ??
ARCHIVO LA NUEVA.

Newspapers in Spanish

Newspapers from Argentina