Los comerciantes chilenos extrañan a los argentinos
La fuerte crisis monetaria que afecta a nuestro país también se vio reflejada en las compras en el vecino país.
La imagen de turistas argentinos llenando valijas enteras con compras en centros comerciales de Santiago y otras ciudades chilenas ya no es tan común como hasta hace unos meses.
Y es que los visitantes argentinos aprovechaban un tipo de cambio favorable a sus golpeados salarios y poder adquisitivo para comprar vestuario, calzado y tecnología hasta por menos de la mitad del precio de las tiendas de su país.
Pero según cifras de oficiales, en el primer semestre los compradores en Chile cayeron a 887.769 personas, frente a las 1,63 millones en el mismo período de 2018, a medida que se profundiza la crisis económica.
“La situación de Argentina está impactando a toda la región”, dijo Mónica Zalaquett, subsecretaria de Turismo trasandina.
La funcionaria detalló que a julio la caída acumulada de llegadas de turistas del a Chile alcanza el 40% y sólo el mes de julio retrocedió un 20% respecto de 2018.
Pero considerando que
muchos hacían “turismo de compras”, el desplome se ve reflejado también en que el gasto en tarjeta de crédito internacional acumulado a junio 2019 cayó un 11,5%.
“Viajamos porque ya habíamos comprado los pasajes, pero estamos intentando gastar lo menos posible”, confesó Silvana Blanco, una oficinista que reside en Buenos Aires, mientras recorría un populoso centro comercial en Santiago.
Hace un año, la moneda argentina equivalía 22 pesos chilenos, mientras que en la actualidad ha caído hasta los 13 pesos, haciendo menos rentable la compra de vestuario, calzado y tecnología.
El último sacudón para la
economía argentina vino tras las PASO, que mostraron una debilidad del actual presidente Mauricio Macri frente a su principal oponente, Alberto Fernández.
El impacto no ha sido mayor para la industria turística chilena debido a una alta demanda puntual en torno al eclipse total de sol que atrajo un importante número de visitantes al país en julio.
Pero las ventas minoristas, que se han deprimido en los últimos meses en medio de la persistente debilidad de los principales sectores económicos locales, no son inmunes al impacto.
“El mercado argentino es el 40-45% del turismo receptivo para Chile por lo tanto influye en la estadísticas (...). Creo que los que más han resentido esto son los centros comerciales, que es ahí donde finalmente estaba el gran consumo”, manifestó Lorena Arriagada, secretaria general de la Asociación Chilena de Empresas de Turismo.
El ingreso de divisas por llegada de turistas argentinos llegó a 822 millones de dólares en 2018, muy por encima de los 453 millones que dejaron los brasileños, el segundo mayor arribo.