“El delito sube en sectores y baja en otros”
El comisario Marcelo Álvarez, titular de la Comisaría Tercera, evaluó a la localidad en materia de seguridad.
Un análisis minucioso desde el punto de vista de la seguridad en Ingeniero White realizó el jefe de la seccional Tercera de policía, comisario Marcelo Damián Álvarez, quien confirmó que la tasa de delitos sube en determinados sectores de la localidad portuaria y desciende en otros.
Para el hombre de 43 años, a cargo de la comisaría desde marzo, también se percibe un fenómeno de estacionalidad respecto del índice delictivo.
“En White, durante determinadas épocas, el índice de delitos aumenta y en otros momentos la cantidad de ilícitos disminuye. Esto fluctúa constantemente y la inseguridad se registra por sectores”, enfatizó Álvarez en el marco del 134º aniversario de la localidad.
“Hay zonas donde los delitos se incrementan, mientras que en otros sectores la cantidad de ilícitos se reduce. El contexto, en ese sentido, es muy variable y esto se debe principalmente al aspecto social, que incide directamente en la seguridad”, agregó. A criterio del entrevistado, la seguridad no solo engloba a la función policial sino también a cuestiones económicas y sociales, que a su vez involucran a la educación. “Por eso la seguridad es una materia muy compleja”, opinó.
Al respecto, el uniformado se refirió al barrio Saladero, donde desde hace muchos años se cometen robos mediante la modalidad “piraña”. “Este es uno de los sectores donde mayor problemática hay, pero en el último mes no se registraron hechos como venía sucediendo”, sentenció el servidor público.
Según analizó Álvarez, aun previo a la instalación de un destacamento policial móvil en la zona de El Guanaco ya se notaba una caída en el número de sustracciones perpetradas bajo la metodología mencionada.
“Tuvimos hechos mucho más aislados, tal vez por contar con la presencia de mayor cantidad de efectivos tanto de fuerzas federales como de la provincia, que desalentó la acción delictiva. Saturando sectores, siempre uno hace que haya una disminución de delitos en los mismos”, explicó el jefe seccional.
“Esto provoca que se afecten más medios logísticos y humanos”, acotó. “La localidad estaba tranquila y en el último tiempo se produjo una seguidilla de delitos contra los clubes Comercial y Whitense, y en algunos domicilios. Pero ahora el delito mermó, a pesar de que hay sectores complejos donde se producen hechos delictivos”, resaltó.
Por otra parte, el funcionario describió la situación actual en la sede policial whitense e hizo hincapié en la insuficiencia de personal, pero reconoció que esta contra es común a todas las dependencias de la fuerza.
“Me gustaría disponer de 200 efectivos y tener de guardia a la mayor cantidad del personal, para poder brindar un servicio más eficiente”, anheló el hombre de 43 años.
Actualmente en la comisaría Tercera prestan servicio 50 numerarios, entre personal administrativo y de “comando”, es decir aquellos que portan arma, visten uniforme y cumplen tareas operativas.
“Cada guardia está compuesta por 6/7 efectivos. Gracias a Dios tengo una buena cantidad de móviles, me gustaría poder sacar a la calle todos los patrulleros con dotación completa las 24 horas del día, pero no es posible porque el recurso humano está afectado”, afirmó el titular de la seccional whitense.
“Ahora, a la mañana, solamente tengo tres móviles afuera porque no cuento con el personal suficiente para mandar a la calle a los otros tres”, confirmó el entrevistado.
Relación policía-justicia
En cuanto a la relación entre las autoridades policiales y los jueces bahienses, sobre todo tras la liberación de Agustín “Pifia” Correa Bilbao, quien había sido detenido menos de una semana antes por su presunta autoría en robos en las citadas entidades deportivas de la localidad portuaria, Álvarez manifestó que “somos simples auxiliares de la justicia”. “Nosotros hacemos las actuaciones, se las presentamos a la Justicia, ponemos a su disposición a la persona aprehendida si es el caso, y ellos efectúan la tarea judicial”, precisó.
“No me corresponde juzgar la función judicial, ellos toman las decisiones y no las voy a objetar. Las tengo que respetar independientemente de que siempre voy a querer que esté detenido aquel que comete un delito”, añadió.
“Los jueces son los que deciden la liberación o la detención, el enjuiciamiento y la (eventual) condena de alguien”, expresó el uniformado.