La Dirección Institucional de la UIBB establecerá nuevos vínculos para ayudar a las empresas.
La pandemia puso en evidencia que es muy valiosa la constante profesionalización de las áreas responsables de la comunicación y las relaciones que mantienen las instituciones. Desde la Dirección Institucional de la UIBB se buscará sostener, reforzar y cre
Me invitaron a escribir algunas líneas en este espacio, a modo de presentación por el nuevo rol que desarrollaré, como Directora Institucional, a partir de mi reciente incorporación al equipo de la UIBB, desde del 1 de Mayo coincidencia, simbólica y estimulante para mí, con el Día Internacional del Trabajo.
Entonces, antes que nada, me presento.
Soy una Licenciada en Filosofía que, con la experiencia laboral, a lo largo de 24 años en Dow, se desarrolló como profesional de la Comunicación Estratégica, los Asuntos Públicos y de Gobierno, la Gestión de Crisis y la Sustentabilidad. Aprendizajes y competencias que me permitieron, en 2017, emprender un nuevo rumbo, ya retirada de la compañía, como consultora de empresas, organizaciones y líderes, en los temas de mi especialidad.
Dicho esto, aprovecho esta oportunidad para compartir algunas pocas reflexiones personales.
Llevo muchos años trabajando en estos temas. Ninguno ha sido igual al otro y muchos han sido muy desafiantes. Pero sin lugar a duda, nada hasta ahora supera la excepcionalidad de 2020, que se extiende aún durante 2021, por todo lo que implica la pandemia de COVID-19, en cualquiera de los planos en que se nos ocurra enmarcarla para el análisis y la reen flexión y por cómo, a todos, a nivel individual y colectivo, nos dio vuelta todos los planes.
Es cierto que los responsables de Comunicación y Relaciones Institucionales hace ya mucho tiempo que vienen siendo reconocidos como estratégicos dentro de las estructuras de empresas, gobiernos y organizaciones. Sin embargo, como nunca, la pandemia puso en evidencia su aporte clave y la necesidad de la constante profesionalización de esas áreas.
Ayudar a componer una visión del contexto, indagar en el territorio, conocer los actores y sus intereses y necesidades, poder plantear distintas alternativas de diálogo y colaboración, habilitar la escucha, tender puentes, facilitar el contacto, hoy mediante canales digitales, que de ocasionales en su uso pasaron a ser cotidianos…son algunas de las tareas que se volvieron imprescindibles.
Y así fue como nos debimos esforzar en buscar coincidencias en las diferencias, porque en las crisis las distracciones y enfrentamientos nos debilitan. Hubo que ser flexibles y ágiles y reconvertir los programas e iniciativas de Sustentabilidad y Responsabilidad Social para acompañar a los sectores más castigados, ya sea sanitaria como económicamente, atender la diversidad de expectativas y crear nuevas alianzas para hacer
junto a otros, porque individualmente no alcanzaba o no sabíamos cómo.
Las áreas de Relaciones Institucionales y Comunicación han hecho esto y mucho más, también atendiendo en numerosos casos, al interior de las organizaciones, las necesidades de contención e información del personal, mientras en las empresas, con protocolos mediante y muchísimo esfuerzo extra, se mantuvo la actividad productiva y de servicios esenciales.
Desde este nuevo rol en la UIBB y dentro del contexto complejo de la pandemia, buscaremos sostener, reforzar y crear nuevos vínculos, que ayuden a las empresas a lograr mayor cooperación mutua. Exploraremos nuevas formas de relación con la sociedad y sus diferentes actores, con herramientas y canales que nos permitan estar cerca aún con distancia social, y trabajaremos para revalorizar el rol de la industria y las empresas en el desarrollo sustentable con inclusión social. Acompañaremos y colaboraremos con las autoridades y departamentos de la Unión, para avanzar en las metas propuestas y hacer de las relaciones institucionales, una fortaleza y una oportunidad de encuentro y crecisacar miento. Colaboraremos en los temas estratégicos de la agenda de la ciudad y la región, como actor clave de la economía y la sociedad.
Para finalizar, como una forma de honrar a los que ya no están con nosotros y lo mejor de este momento durísimo que nos toca vivir, me propongo ser agradecida, humilde, empática y resiliente y mantener esa actitud en todas las interacciones que me toque desarrollar, tanto a nivel personal como profesional.