El programa “Huertas de la Ciudad” crece con buena raíz
Ya está presente en 8 espacios comunitarios de distintos barrios y planea desembarcar en varios más.
tiene tres niveles de acción: la huerta familiar, la huerta comunitaria y la huerta municipal.
Desde febrero, el municipio tiene en marcha un proyecto que tiene como objetivo promover una cultura de producción hortícola asociada al consumo familiar y la vida saludable, en un marco amplio de cooperación entre entidades públicas y privadas vocacionalmente orientadas al desarrollo social.
Denominado “Huertas de la Ciudad”, ya está presente en 8 espacios comunitarios de distintos barrios de la periferia y planea desembarcar en muchos más.
“Se pretende desarrollar dos niveles de abordaje. Por un lado, la promoción y capacitación para la construcción de huertas hogareñas y, por otro, la gestión de huertas comunitarias. En los dos casos se acompaña con información para la adopción y planificación de alimentación saludable, gestión de residuos y cuidado del medio ambiente”, señaló Fabián Val, coordinador general del programa que, en primera instancia, tiene previsto capacitar a 500 familias en producción hortícola.
“Simultáneamente trabajamos en distintos espacios de entidades públicas o privadas para el desarrollo de huertas con fines educativos, productivos, alimenticios y de solidaridad barrial”, añadió el ex director del Mercado Municipal.
Según señaló, casi todas las secretarías del municipio tienen algún grado de participación, pasando por Políticas Sociales, Salud e Infraestructura hasta la Dirección de Culto.
“Este programa hace bastante tiempo que estaba en carpeta y lo pusieron en valor el intendente Héctor Gay y el Jefe de Gabinete Adrián Jouglard, quienes armaron un equipo para desarrollarlo en distintos barrios. En ese sentido, los delegados cumplen una función muy importante”.
A esa intención se sumó una enorme rama de colaboradores, integrada por estudiantes de Nutrición, miembros del INTA y asistentes de las sociedades de fomento de los barrios.
“No es sólo enseñarle a la gente a confeccionar una huerta. Sino que también desarrollamos cursos de capacitación para que sepan qué plantar, en qué momento, cómo cuidar la plantación y cómo cuidar la tierra que cultivan. En todo momento hay un equipo de seguimiento para que todos esos temas se lleven a cabo”.
El proyecto tiene tres niveles de acción: la huerta familiar, la huerta comunitaria y la huerta municipal.
“Los dos primeros ya los estamos desarrollando a muy buena escala. El tercer eje está previsto para el año próximo y contempla la creación de un predio para que el municipio genere su propia producción y sea
proveedor de los otros dos programas anteriores”.
Val se mostró sorprendido por la respuesta de los vecinos.
“Se acercó muchísima cantidad de gente a aprender. Los delegados nos acercaron distintas propuestas de lugares para desarrollar la Huerta Comunitaria. Predominaron los comedores, las sociedades de fomento, centros de jubilados y clubes”.
En la columna vertebral del equipo está Graciana Khoeler, de Jefatura de Gabinete; Martín Botta, a cargo del seguimiento territorial; Ximena Selene, coordinadora de la capacitaciones; María Cabarga, ingeniera agrónoma.
“Entre todos evaluamos las condiciones del espacio propuesto y su factibilidad. No es ir y pasar el monocultivador en cualquier lado y sembrar. Se tienen que dar un par de condiciones para que el programa funcione y la gente se incentive a replicar lo que aprende en sus propias casas”.
El programa tiene un fuerte contenido social.
“Hay una interacción permanente con los participantes. Porque se los sigue asesorando cuando comienzan el emprendimiento
“Se acercó muchísima cantidad de gente a aprender y hay una interacción permanente, porque los seguimos asesorando". (Fabián Val)
en sus casas. Ya hay muchos hogares que comenzaron sus huertas. En las capacitaciones hacemos entregas de semillas”.
El coordinador general puntualizó que tienen presencia en 8 lugares, como son la sciedad de fomento Barrio Latino; Hermanas Vicentinas del 9 de Noviembre; Ferro White; Comedor La Ilusión; Centro de Salud L. Piñeiro; Departamento de Salud Mental; Sociedad de Fomento de Grünbein y en Cabildo).
“Seguramente vamos a estar ampliando esa red a otros lugares, porque las solicitudes para sumarse son muchas”, cerró Val.