La política de tasas altas de la Reserva Federal afecta a la salud de más bancos en EE.UU.
Las acciones antiinflacionarias del banco central del país norteamericano tienen como correlato dificultades en las entidades financieras porque sus activos pierden valor.
El banco regional estadounidense PacWest registraba a finales de la semana pasada una caída de alrededor del 50% en su cotización de Wall Street y volvía a encender los temores de una crisis bancaria en Estados Unidos.
El derrumbe se daba pese a que el banco californiano intentaba, sobre la madrugada del viernes, calmar a los mercados, al señalar que sus depósitos crecieron desde las primeras tensiones en el sector en marzo pasado, y que está dialogando con potenciales inversores ya sea para una inyección de capital o, en última instancia, para una venta de sus activos.
"El banco no registró fugas de depósitos a un nivel fuera de lo ordinario tras la venta de First Republic el lunes pasado. Nuestro capital y liquidez disponible siguen siendo sólidos y exceden nuestros depósitos sin asegurar", indicó PacWest a través de un comunicado.
Asimismo, indicó que continua "evaluando todas las opciones para maximizar el valor a los accionistas".
No obstante, por el momento la la posibilidad de una venta quedó descartada por la ausencia de interesados, según indicaron fuentes cercanas a la agencia de noticias Bloomberg, puesto que deberán asumir fuertes pérdidas en algunos de los préstamos concedidos.
La crisis en los pequeños y medianos bancos estadounidenses ya resultó en el colapso de Silicon Valley Bank (SVB), Signature Bank y Slivergate; y en la incautación estatal y posterior venta de First Republic a JPMorgan, el lunes último.
Las tensiones nacen de los problemas de liquidez de las entidades, que sufrieron fuertes corridas en los últimos meses.
Las mismas, por lo general, presentaban problemas en sus hojas de balances con un desajuste entre activos y pasivos, habiendo invertido en bonos a largo plazo del Tesoro y otras inversiones que perdieron gran parte de su valor por las subas de tasas de la Reserva Federal (Fed), situación que, a su vez, las obliga a pagar más en intereses a sus depositantes.
Otro punto que alimenta el temor es que suelen tener una gran cantidad de clientes con depósitos por encima de los US$ 250.000 en sus cuentas, es decir, que superan el tope asegurado por el gobierno estadounidense, algo que también sucedió en el caso del SVB pero que no afectaría a PacWest, que reportó un 75% de clientes asegurados.
La propia Fed, en un informe publicado el viernes último, reconoció que tardó demasiado en reconocer las consecuencias de las subas de tasas en los bancos, y prometió refinar sus normas reguladoras
PacWest no se trata del único banco en dificultades: Western Alliance reportó caídas de mercado del 53% luego de reportar fugas en sus depósitos, Comerica, 16%; y Zions Bancorp, 15%.