Nuevos jugadores se suben al boom de los pagos digitales y aumenta la competencia
Las transacciones cursadas a través de celulares y terminales mPOS aumentan a un ritmo exponencial, lo que interesa tanto a fintechs como bancos tradicionales.
La tendencia creciente a pagar con teléfonos celulares y tarjetas plásticas en lugar de efectivo está impulsando el mercado de terminales de cobro o POS que, tras años de estancamiento y concentración en dos empresas (Fiserv y Prisma), en los últimos meses incorporó a dos nuevos actores (Ualá y GetNet) que apuntan a sumar competencia y a que más comercios adopten esta tecnología.
El uso de dinero digital creció exponencialmente en los últimos cinco años, la muestra más cabal son los pagos con transferencia desde celulares, que pasaron de apenas existir en 2018 a alcanzar casi 200 millones de operaciones sólo en abril pasado, cuando se volvió el medio de pago digital más usado de la Argentina al superar a la tarjeta de débito.
Lo mismo se advirtió entre las terminales de cobro portátiles (mPOS, de tamaño pequeño, que permiten cobrar con tarjetas, pero que requieren de un teléfono celular o tablet para validar las transacciones), que pasaron de 645.000 a 4,4 millones en el mismo lapso, según datos del Banco Central.
Sin embargo, las terminales POS (por sus siglas en inglés, Point of Sale), que son más grandes que las mPOS y que funcionan en forma autónoma, permitiendo a los comercios cobrar con tarjetas de débito, crédito y prepagas, así como con teléfonos celulares a través de la lectura de códigos QR, registraron un promedio mensual de 840.000 unidades durante el año 2022, apenas 40.000 más que en 2018.
La inestabilidad macrodecoración,
Por ahora, la inestabilidad y el costo no justifican la instalación de grandes terminales POS en los comercios.
económica, el surgimiento de microemprendedores que no facturan lo suficiente como para necesitar un aparato de estas características y la falta de competidores que dinamicen el mercado son algunas de las respuestas a por qué no despegó el uso de este medio de cobro.
De allí que nuevos actores como Ualá y GetNet -una empresa del Grupo Santander- decidieron lanzar en las últimas semanas sus propias versiones de terminales POS, para competir en un mercado históricamente dominado por dos empresas (Prisma y Fiserv).
"El POS Pro está pensado para empresas medianas y grandes de rubros como supermercados, gastronomía, indumentaria, venta de artículos para el hogar y
La Nueva. @lanuevaweb entre otros", explicó a Télam Maia Eliscovich, VP de Ualá Bis.
El dispositivo, aseguró, permite aceptar pagos con cualquier tarjeta y QR, ofrecer cuotas sin interés, financiación con planes "Ahora" y no necesita estar conectado a un celular, ya que cuenta con sistema operativo Android intuitivo, pantalla táctil e impresora para tickets.
"Nuestra propuesta de valor se caracteriza por comisiones bajas y acreditación inmediata. Poder tener el dinero en el acto es nuestro gran diferencial. La plata recibida se convierte en saldo Ualá y permite al emprendedor o comercio contar con flujo de liquidez para cubrir los gastos operativos o invertirlo en el crecimiento del negocio", señaló Eliscovich.
Del mismo modo, GetNet salió con una propuesta similar en términos de tecnología, aunque su fuerte pretende ser la infraestructura que le ofrece el Banco Santander, para que los comerciantes puedan trasladar las promociones y descuentos que ofrece la entidad financiera a sus clientes.
"Tenemos un objetivo de capturar 100.000 nuevos clientes. Apuntamos a comercios más chicos o medianos que no acceden a promociones bancarias, a los que les estamos dando una promoción de 20% descuento a clientes Santander", detalló Leo Salovich, CEO de Getnet Argentina.
El cambio en las formas de pagar, sobre todo en las generaciones más jóvenes, es lo que está impulsado a comercios que quizás no prestaron atención a adoptar este mecanismo, hoy se pierdan ventas, por lo que es de esperarse que haya
“Las empresas reaccionaron con una propuesta de terminales más pequeñas y menos costosas para subirse a un mercado expansivo”.