De Pringles a China: con la música y los sueños en el sudeste asiático
Nath y Lucas son los músicos anfitriones del Chimelong Hengqin Bay Hotel, en China. Antes, cumplieron un contrato de 6 meses en Vietnam.
Los pringlenses Nath Ottaviano y Lucas Carrillo, dúo y compañeros de vida se encuentran en Zhuhai, provincia de Guangdong, al sur de China contratados por la "Chimelong Company".
Ella tiene una trayectoria como cantante, estudió canto e idiomas desde pequeña y es sumamente versátil por lo que ha incursionado en distintos géneros y lleva varios años viajando a Asia contratada por distintas empresas. Lucas es músico profesional y sesionista.
Llegaron a China luego de vivir una gran experiencia de seis meses en Vietnam en donde realizaban su performance en una Casa de Té -Teatro en un famoso parque temático emplazado en altura.
Ahora, se mudaron a China adonde Nath llegó por primera vez en 2009 cuando obtuvo su primer contrato internacional y lo que le permitió trabajar para diferentes compañías.
Una de estas compañías, sabiendo que estaba en Asia, la volvió a convocar y hoy junto a Lucas Carrillo se encuentra en el Chimelong Park, uno de los 15 mega parques temáticos más visitados del mundo.
"Es prácticamente una mini ciudad, tiene su propio circo internacional con artistas reconocidos de todo el mundo, muchos de los cuales trabajaron para el Cirque du Soleil. Tiene tres mega hoteles y sus parques acuáticos y safaris", contó Nath.
La cantante comentó que, en principio, estarán cumpliendo un contrato de 7 meses, hasta el 28 de abril, en temporada alta --por el Año Dragón, una fecha muy significativa en toda Asia y más aún en China-- como músicos anfitriones del Chimelong Hengqin Bay Hotel.
"Chimelong Company tiene mini ciudades temáticas y de parques y circos internacionales. Hace dos meses se hizo un festival internacional de los circos más destacados del mundo. Vinieron los representantes y artistas más importantes. Fue una experiencia tremenda", narró.
"La idea de la compañía es renovar nuestro contrato por un año más pero hace un año y dos meses que estamos trabajando sin parar así que es probable que volvamos a Argentina en mayo o junio para ver a la familia", dijo.
Además, analizan otras propuestas en Turquía, Maldivas y en Vietnam, con otra compañía.
"Vietnam está en un crecimiento increíble, es un país en desarrollo, un poco a la sombra de China, y por eso no se lo conoce tanto, pero la sociedad es maravillosa. La gente es bondadosa, no tiene doble sentido, no hay maldad", destacó.
"Podés irte y dejar la cartera en la playa o un teléfono y al otro día buscarlo en la arena y encontrarlo allí. Son lugares con cero nivel de inseguridad. Podés caminar a cualquier hora de cualquier manera porque no hay lugares peligrosos", aseguró.
Nath, sorprendida por esta cultura, contó que si bien las penas por los delitos son altas, las personas no se rigen tanto por temor a la ley sino porque no tienen sentido de ventaja.
"Siempre ven de qué manera ayudarte, independientemente de la clase social, desde un trabajador de la calle hasta una persona con un gran poder adquisitivo están prestos a ser amables", señaló.
El dúo, por el solo hecho de ser argentino, no pasa desapercibido ya que tanto en Vietnam como en China aman la Argentina.
"No es que nos conocen más o menos, nos aman. Es una fiebre que se intensificó post mundial. Todos hinchaban por Argentina. Te cruzás vietnamitas y chinos con la camiseta de
Messi pero también de otros jugadores", destacó.
"En Vietnam nos aman además por el Che Guevara. Es imposible que digas que sos de Argentina y te pregunten dónde es ese país. Tienen un tremendo fanatismo. Si vas a un shopping siempre alguno de los maniquíes de las marcas más famosas están vestidos con equipos argentinos", observó.
Incluso el General Manager del dúo es amante del fútbol y de Maradona, como casi todos los asiáticos de más de 40 años.
"En cuanto a Vietnam fue una experiencia espectacular. Nos contrató la compañía internacional Sun World Ba Na Hills, la más famosa del sudeste asiático", relató.
Es uno de los parques temáticos con atractivos más alto del mundo y una verdadera ciudad emplazada a 1600 metros de altura.
"Es impresionante. El Cable Card (telesférico) que se utiliza para llegar hasta el parque es el más largo que existe por lo que tiene el Récord Guiness. Tardás 25 minutos para subir desde el nivel del mar a los 1.600 metros", contó.
Allí realizaban su performance cada mediodía en una Casa de Té-Teatro francesa que se llama Rosa Sky.
"La idea de la compañía es renovar nuestro contrato, pero antes vamos a volver a la Argentina para ver a la familia".