Covid: a cuatro años del inicio del aislamiento, ¿qué aprendimos de la pandemia?
Con casi 800.000.000 personas infectadas y 6,9 millones de fallecidos, las 8.000 millones de personas que hay en el mundo adquirimos conocimientos para lidiar con el coronavirus ¿Por qué aún quedan cosas por aprender?
“Hemos tomado una decisión que es dictar un Decreto de Necesidad y Urgencia (DNU). Por ese decreto a partir de la 00:00 horas, de mañana, deberán someterse al aislamiento social preventivo y obligatorio”.
El mensaje de Alberto Fernández (presidente en ese momento) del jueves 19 de marzo de 2020 se replicaba por cadena nacional y caía como una bomba en cada uno de los rincones de nuestro territorio.
Era el inicio de la cuarentena como medida de prevención ante el avance del coronavirus, que se esparcía por todo el mundo.
Desde allí hasta la actualidad, donde aún se siguen registrando casos, mucho tiempo transcurrió y muchos cambios se produjeron.
Fueron momentos difíciles, angustiantes, de sufrimiento y con la pérdida de algún familiar o ser querido, que fue inevitable para cada habitante de nuestro país.
Calles vacías, Noches interminables, encierro y problemas de salud mental por la situación que se vivió marcaron a fuego en futuro del mundo.
Ahora, que aprendizajes y lecciones nos dejó la pandemia. Aquí ofrecemos 8 puntos de los cambios producidos.
A cuatro años de la declaración oficial del status de pandemia por parte de la OMS a raíz de aparición del nuevo coronavirus SARSCoV-2 que genera la enfermedad Covid-19, muchos son los distintos entes, organismos internacionales, revistas científicas y profesionales que realizaron una mirada profunda acerca de las lecciones aprendidas en este tiempo tras la irrupción del patógeno que puso en vilo todos los sistemas de salud del mundo, incluidos los de las superpotencias.
1. La aparición de las vacunas
Sin dudas, las vacunas fueron la gran herramienta desarrollada por la ciencia para hacer frente a la pandemia por Covid-19.
“Las vacunas (su desarrollo, adquisición y aplicación) adquirieron un lugar central, no sólo en la esperanza de la población, sino como meta y punto de llegada de toda estrategia de salud pública. Hoy, con la gran mayoría de la población del país vacunada, es fácil tentarnos con la idea de que el Sars-Cov-2 ha dejado de ser un problema. Y sin dudas, ha disminuido categóricamente el riesgo que representa para la salud y la vida de la población”, describieron Rodrigo Quiroga (bioquímico e investigador del Conicet), Sol Minoldo (Investigadora del Conicet) y Javier Fariña (médico infectólogo).
Es a los pocos meses de la aparición del patógeno, varios laboratorios trabajaron en distintas plataformas vacunatorias en forma muy intensa para crear lo que normalmente lleva 10 o 15 años. La ciencia avanzó a pasos agigantados en 2020 y en menos de un año las primeras vacunas ya estaban listas para ser aplicadas en los brazos de millones de personas.
2. Estado de vigilancia
“Pese a que la pandemia se terminó, hay que seguir la vigilancia genómica por si aparecen nuevas variantes”, alertó el el doctor Jarbas Barbosa, Director de la Organización Panamericana de la Salud (OPS).
Si bien en mucha menor medida que al principio de la cuarentena, continúan apareciendo algunos casos positivos en nuestro país.
Es por ello que, si bien no es obligatorio el uso del barbijo, se recomienda a las personas mayores o aquellas que presentan alguna enfermedad preexistente tomar ciertos recaudos como el lavado de mano y, en lo posible, el uso del alcohol el gel.
“Hoy estamos en una situación totalmente diferente a la que vivimos hace tres años. La incidencia del Covid hoy es notoriamente inferior al año pasado y a los anteriores, y en ese sentido, la OPS logró desplegar un trabajo muy importante respecto de la información necesaria para afrontar la pandemia y al acceso de herramientas para combatirla, como las vacunas”, indicó Barbosa,
3. Cuidado del Covid y de otros patógenos
Los expertos infectólogos destacan que si bien hay que prestar atención a las posibles mutaciones que el SARS-CoV-2 pueda tener en el futuro, es necesario vigilar también nuevas amenazas a los humanos.
“Hoy se está viendo una circulación natural del coronavirus. Tenemos que pasar la hoja a otro capítulo, como la propagación del virus de la gripe aviar H5N1, que por ahora afecta a las aves, pero que no tengas ninguna duda va a terminar siendo un problema
En el inicio de la pandemia hubo momentos difíciles, angustiantes, de sufrimiento y con la pérdida de algún familiar o ser querido.
para los humanos si no nos cuidamos. Otro de los problemas que afrontamos en la actualidad es el dengue, que muestra un constante crecimiento de casos con en trasncurrir de los días. Lo que tenemos que ver ahora es cómo proteger a los que tienen más riesgo”, explicó a Infobae el médico Ricardo Teijeiro especialista del servicio de Infectología del Hospital Pirovano de la Ciudad de Buenos Aires.
4. Cuidados personales
Con la pandemia devino el aprendizaje y el refuerzo de lecciones aprendidas con anterioridad sobre los hábitos higiénicos saludables.
Aprendimos a mantener distancia social, a saludarnos con los puños, a lavarnos frecuentemente las manos, a utilizar alcohol en gel luego de tocar distintas superficies sucias o dinero, a ventilar periódicamente los ambientes cerrados y fundamentalmente a utilizar tapabocas o barbijos para evitar contagiarnos o contagiar a otros.
Si bien ahora su uso no es obligatorio, cuando comenzó la pandemia, se requirió un esfuerzo global para garantizar que todos practicaran comportamientos para mantenerse saludables y seguros, y también para mantener saludables a los demás.
Los expertos afirman que con la pandemia, muchas personas han aprendido más sobre los patógenos y virus respiratorios, y cómo se propagan de una persona a otra.
5. Cambio de paradigma educativo
“Mientras el mundo avanzaba, nuestros sistemas educativos seguían ofreciendo variaciones de un modelo educativo del siglo pasado. Tras la pandemia, sin embargo, la escuela ha dejado de asociarse únicamente a un espacio físico donde sucede un aprendizaje de masas de manera sincrónica. Se ha generado un nuevo espacio en el que nos hemos abierto mentalmente a la posibilidad de que la educación puede pasar desde cualquier lugar, en diferentes tiempos (de forma asincrónica) y adaptándose a las necesidades y ritmos de cada estudiante”, asegura un documento del Banco InteJamaica de Desarrollo (BID).
“Las formas de responder a la pandemia han sido extremadamente heterogéneas, tanto entre países como dentro de los mismos países, por lo que los estudiantes han tenido experiencias educativas muy diversas. También hemos visto surgir muchas alianzas entre el sector público y privado. Compañías de telecomunicaciones e internet que han liberado planes de datos para programas y portales educativos en Barbados o Paraguay, Argentina (Educ.ar) o en
(MoEYI)”, destacó el informe.
6. Telemedicina como herramienta diaria
La telemedicina podría convertirse en la nueva normalidad a partir de su irrupción y estandarización a partir de las restricciones de circulación que impuso la pandemia en todo el mundo.
“Lo que sucedió: los médicos y los pacientes que han utilizado la telemedicina (tecnología que les permite brindar atención médica de forma remota) descubrieron que puede funcionar bien para ciertas citas, que van desde chequeos cardiológicos hasta terapia para una afección de salud mental. Muchos pacientes que necesitaban una prueba médica también han descubierto que es posible sustituirla por una versión casera. Lo que hemos aprendido: si bien todavía hay problemas por los que necesita ver a un médico en persona, la pandemia introdujo una nueva urgencia en lo que había sido un cambio graramercano dual a plataformas como Zoom para visitas remotas de pacientes”, sostiene un documento firmado por expertos de la Universidad de Yale, en Estados Unidos.
7. Teletrabajo y una revolución laboral inédita
El hecho de quedarse en casa obligó a millones de personas a trabajar en forma remota.
“El primer año de la pandemia demostró tres cosas: nuestra antigua definición de trabajadores esenciales era inadecuada; el número y el tipo de trabajadores que necesitamos ahora son profundamente diferentes; y la mayoría de los trabajadores del conocimiento pueden hacer el trabajo desde casa”, destaca un informe de la consultora internacional Mckinsey.
8. Mejores herramientas y coordinación mundial
El Covid-19 impulsó varios marcos de actuación y recomendaciones que se tendrían que llevar a cabo para fortalecer la preparación de los entornos locales a riesgos sistémicos.
La OMS creó recomendaciones para autoridades locales a fin de fortalecer la preparación frente futuras pandemias.
Naciones Unidas Hábitat presentó un informe que recoge lecciones aprendidas de la respuesta local al Covid y propuestas para remodelar los entornos urbanos con el objetivo de reducir los impactos de futuras pandemias, reduciendo contagios, efectos económicos, sociales y ambientales adversos, y creando ciudades más sostenibles.
Y en un contexto más amplio de riesgos sistémicos, la OMS creó un marco con ocho áreas de trabajo: gobernanza y recursos, coordinación multisectorial, alta densidad de población y movimiento, estrategias para involucrar a la comunidad local y comunicar riesgos, cómo centrarse en grupos vulnerables, acceso a evidencia científica e información contrastada, el comercio y la industria, y la organización y el acceso a servicios sanitarios o esenciales.
Entes, organismos, revistas científicas y profesionales que realizaron una mirada profunda acerca de las lecciones aprendidas.