Desde julio, las jubilaciones ajustarán por IPC
para la mínima, se puede proyectar qué puede pasar con el poder adquisitivo durante el mes en curso.
Para los jubilados que no cobren la mínima el aumento nominal va a ser del 11%, mientras que para los que cobran la mínima va a ser del 7,8%.
Nuevamente, al dejar sin aumentos al bono, que será de igual valor de $70.000 tanto en abril como en mayo, la jubilación mínima total aumenta en menor proporción.
Concretamente, para que en mayo un jubilado con la mínima tenga el mismo poder adquisitivo que en abril, la inflación debería ser del 7,8% o, de lo contrario, volvería a resignar poder de compra.
Dada una inflación esperada del 7,5%, el poder adquisitivo de este jubilado aumentaría algo mínimo respecto a abril, de acuerdo con las estimaciones del Iaraf.
Por el contrario, el jubilado que no cobra la mínima
A partir del mes de julio del corriente, los haberes jubilatorios se actualizarán en función del IPC del INDEC de mayo. Hasta ese mes, sigue vigente la fórmula promulgada por el expresidente Alberto Fernández.
Así, los meses de abril, mayo y junio son parte de la transición y se estipula el otorgamiento de adelantos de aumentos basados en el IPC.
Se aclara que si en ese período los aumentos por inflación dan un mejor resultado para los jubilados que el aumento trimestral por fórmula, se mantendrán los aumentos otorgados por el IPC.
A partir del séptimo mes. ya serán aplicados los aumentos únicamente en base a la inflación minorista. tendría un aumento real del 3,3% de confirmarse las estimaciones.
Pese a ello, desde la entidad advierten que la caída del poder de compra de los pasivos seguirá siendo brutal.
"Si se acumulan los primeros 5 meses del año, el jubilado que cobra la mínima terminaría perdiendo un 21,7% del ingreso real de igual periodo de 2023".
"Por su parte, el que no cobra la mínima terminaría perdiendo un 33,9% del ingreso real que tuvo en los primeros 5 meses de 2023".
"Como puede apreciarse, dado que en mayo la pérdida real interanual sería menor a la del primer cuatrimestre, al cabo de 5 meses un jubilado seguiría perdiendo mucho poder adquisitivo que en 2023, pero menos que lo que perdió al principio", aclaran.
El bono, la clave
El ejercicio del Iaraf permite concluir que si la inflación perpetúa su derrotero a la baja, el poder adquisitivo de los haberes mejorará, aunque partiendo de pisos muy bajos y siempre por abajo de 2023.
Pese a ello, si se confirma el dato inflacionario de abril, que rondaría el 8%, febrero podría haber sido el piso del poder adquisitivo de las jubilaciones.
Per en el caso de los jubilados con la mínima, esta situación va a depender de lo que suceda con el bono a partir de junio.
Por ejemplo, si el gobierno decidiera mantener el valor del bono en $70.000 durante el sexto mes y la inflación de abril fuera del 9% (esa es la base para el cálculo de la movilidad), el jubilado con la mínima tendrá un aumento del 6,5% en junio, de modo que resignaría poder de compra, por lo que la inflación de junio no debería superar ese porcentaje.
El margen de tolerancia a la inflación se daría si se otorgara un aumento de 5.000 pesos en el bono.
De darse este escenario, la inflación necesaria para mantener el poder adquisitivo de mayo subiría hasta el 8,4%.
La clave para conocer la suerte de los jubilados de la mínima radica en saber si el Gobierno actualizará o no el bono compensatorio.
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