La Nueva

Buscar víctimas, buscar testigos

Nuevas disposicio­nes de la Fiscalía General buscan agilizar la resolución de investigac­iones que permanecen estancadas.

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LA FISCALÍA General de nuestra ciudad ha dado un paso clave para la resolución de cientos y cientos de causas legales que no se terminan de resolver porque no existe un área dedicada, de manera exclusiva, a la búsqueda de personas sin cuya presencia no es posible avanzar.

AUNQUE PAREZCA increíble (más allá de que vivimos en un país donde todo es posible), la justicia local llega a archivar causas o las mismas prescriben cuando, por ejemplo, un testigo de un hecho o la propia víctima, citados a declarar tres años después de ocurrido (por mencionar un plazo menor), ya no tienen el mismo domicilio.

ESE SIMPLE hecho es suficiente para que la Justicia no pueda ubicarlos.

“HAY CAUSAS que se archivan simplement­e porque no podemos ubicar a un testigo clave. Pero no lo podemos hacer porque tampoco nadie lo busca. No tenemos ni estructura ni personal que asuma esa tarea”, señaló una alta autoridad de la fiscalía.

EN GENERAL, se refiere a personas que se mudaron dentro de la ciudad, que figuran en las redes sociales, que no se esconden. Pero, porque nadie las llama, tampoco se enteran de que se las requiere.

HASTA AHORA, el mecanismo de búsqueda era el siguiente: Fiscalía libra un pedido para que la policía proceda a detectar a la persona en cuestión.

RECIBIDO EL pedido, el nombre del buscado se incorpora a una base de datos y, a partir de ahí, encontrarl­o depende, pura y exclusivam­ente, de algún eventual control policial genérico.

LOS ESPECIALIS­TAS en el cálculo de probabilid­ades segurament­e indicarían como ínfimo el porcentaje de que ambas situacione­s coincidan en tiempo y espacio.

CUANDO SE conocen estas carencias operativas se entiende por qué la Justicia resulta tan cuestionad­a, por qué existen demoras y postergaci­ones, por qué muchos casos nunca se terminan de resolver.

AHORA, UN grupo de personas va a ocuparse de buscar a las 500 personas que en nuestra ciudad se necesita ubicar, de las cuales un 25 por ciento son imputados en distintas causas.

GENERA CIERTO escozor que durante tanto tiempo nada se haya hecho al respecto. Como si la Justicia nunca terminara de encontrars­e a sí misma.

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