La defensa de la vida estuvo por encima de todo
La reunión contó con la organización de varias entidades locales que colaboran con problemáticas sociales del niño y la familia. Por sobre todo, se alentó a defender la vida, siempre. Hubo una gran convocatoria.
La celebración del Día del Niño por Nacer tuvo una notable convocatoria en el Parque de Mayo, donde organizaciones y ONG que desarrollan actividades sociales relacionadas con la vida de los más chicos cumplieron el objetivo. A la reunión, realizada en medio del debate por la despenalización del aborto, asistieron casi 1.000 personas. Hubo marchas en todo el país.
FUE LA NOVENA EDICIÓN
Cerca de mil personas concurrieron la tarde de ayer a la novena celebración del Día del Niño por Nacer.
Del encuentro participaron varias organizaciones y ONG’s locales, que desarrollan actividades sociales relacionadas con la vida de los niños, tanto en su nacimiento como durante sus primeros años.
Nunca hubo una participación tan importante de la gente, alentada en parte por el lugar del encuentro, en Urquiza y Córdoba del parque de Mayo, la maravillosa jornada climática y un contexto social especial, en el cual la sociedad debate la posible despenalización de aborto.
La celebración coincidió con otras similares realizadas en decenas de ciudades del país, siendo la marcha central en la Ciudad Autónoma de Buenos Aires (ver más información en la página 11).
Del encuentro participaron entidades como Acción Bahiense Comunitaria, Red Pro Vida, Centro de Asistencia a la Vida Naciente, Fertility Care Argentina y Movimiento Familiar Cristiano Hogares de Belén, entre otros.
Sí a la vida
El Día del Niño por Nacer se celebra en todo el mundo para conmemorar, promover y defender la vida humana, desde la concepción en el vientre de la madre.
Si bien las organizaciones presentes se manifiestan a favor de la vida y, como consecuencia, se oponen a la práctica del aborto, en el encuentro se evitó una discusión frontal sobre la legalización de esa práctica, entendiendo que el objetivo del día “es mucho más abarcativo” y no busca que el día se centrara en esa discusión.
Las palabras
María Verónica Fernández, de la entidad ProVida, es una de las organizadoras de la concurrida jornada de ayer.
Explica la intención de la misma de trasmitir que “la vida es algo que debemos cuidar entre todos, un compromiso de muchas organizaciones que se extiende hasta después de nacer. Es entenderla como un bien a proteger y a cuidar”.
Desde ese lugar pretenden tener una mirada “más enriquecedora”, generando espacios donde contener y acompañar, por caso, a las mujeres con “embarazos inesperados”, para servirles de sostén y apoyo.
“Queremos que esas chicas sepan que no están solas, que las vamos a acompañar, cuidar y sostener. La idea es recibir la vida, que hoy demasiadas veces se considera fácilmente desechable, hay que valorizarla”, señaló.
Paula Cuadrado, de Hogares de Belén, explica que esa institución recibe a niños que por diferentes circuns- tancias llegan a este mundo “sin un lugar donde estar”.
“Es una de las soluciones que ofrecemos, hasta que ese bebé encuentre su destino final. Le damos contención y cuidados, lo mimamos y lo malcriamos hasta que la justicia decida su destino, sea en adopción u otra alternativa. Ellos no tienen la culpa de ser rechazados, esa circunstancia es demasiada feo como para no hacerle un lugarcito: eso hacemos”, mencionó.
Como entidad cristiana se opone al aborto: “Estamos a favor de la vida, sin mucha discusión: hay que defenderla siempre”, señaló.
El encuentro se extendió hasta después de las 18. Hubo consignas, carteles con corazones, padres, madres y niños, números artísticos, bailes y aliento a la vida. Un llamamiento a celebrarla y defenderla en toda circunstancia.
El objetivo principal fue celebrar la vida y defenderla. Los participantes evitaron la discusión exclusiva sobre legalizar el aborto.