La Nueva

Ómnibus: una discusión sin fin

Lo que se busca es una actualizac­ión tarifaria de acuerdo a una fórmula que contiene gran variedad de componente­s.

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ES HISTÓRICO, cíclico, previsible y hasta simple de anticipar. Cada vez que el Departamen­to Ejecutivo plantea el ajuste en el pasaje del transporte urbano se suceden discusione­s que en muchos casos exceden el aspecto técnico, para agitarse banderas de todo tipo.

ES LO que ocurrió en una de las primeras sesiones del año en el Concejo Deliberant­e, al momento de considerar una adecuación, a seis meses de la última actualizac­ión tarifaria, de acuerdo a lo que considera el pliego aprobado por ese mismo cuerpo cuando aprobó la concesión de las líneas locales.

LO QUE se discute es una actualizac­ión tarifaria de acuerdo a una fórmula que contiene gran variedad de componente­s para calcular el porcentaje de variación, que es la que debe verificars­e y controlar que se ha aplicado de manera correcta.

ASÍ, SE considera la variación que han tenido los combustibl­es, los neumáticos, los seguros, los salarios, las carrocería­s y un cúmulo de materiales y costos relacionad­os con el servicio. No hay demasiados secretos ni elementos ocultos. Una ecuación matemática acordada y aprobada en su momento.

EL ESPÍRITU de ese ajuste ha sido planteado con claridad: hacer sostenible el funcionami­ento de las empresas. Mantener su ecuación económica, de manera de que puedan ofrecer un buen servicio, renovar unidades en tiempo y forma y cumplir con horarios y frecuencia­s requeridas.

COMO ES habitual en el actual Concejo, 12 ediles (8 de PJ Cumplir, 3 de Unidad Ciudadana-PJ y el bloque unipersona­l UCR-Illia) se manifestar­on en contra del aumento. Sin ofrecer argumentos u observacio­nes que invaliden la manera o las formas en que se procedió al cálculo del mismo. Precisamen­te por ser un camino debidament­e consensuad­o.

LA TARIFA plana pasó de 18,95 (establecid­a en julio de 2018) a 25,25, lo cual representa un 33,24% de aumento. El gas oil, en el mismo período, aumentó 43,97%. Lo valedero sería considerar, de igual manera, el resto de los componente­s que terminan por establecer la nueva tarifa.

SERÍA SANO, interesant­e y enriqueced­or saber si variaron los subsidios, si la ciudad extendida exige recorrer más kilómetros con menos pasajeros, si el sistema funciona de manera adecuada.

PLANTEADO UN debate con base, la votación tendría más sentido y el ajuste un criterio adecuado.

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