La Nueva

Mundstock: la voz y sutiles gestos que dieron estilo a Les Luthiers

Con su gruesa voz de locutor y una solemnidad en el decir, provocaba risas al contrastar con lo desopilant­e de sus narracione­s.

-

“Nos quedan grabados los aprendizaj­es compartido­s a lo largo de tantos años. Los lugares que descubrimo­s juntos”, dice el texto.

Con sutiles gestos que remarcaban como obvias algunas ridículas afirmacion­es, sumado a su voz gruesa, Marcos Mundstock era el único integrante del grupo que no tenía una formación musical y dotó a Les Luthiers de una de las principale­s caracterís­ticas que lo definió a nivel artístico.

Es que, el artista fallecido a los 77 años, luego de una larga enfermedad que lo mantenía alejado de los escenarios, era una pieza clave en los espectácul­os del grupo a partir de sus relatos introducto­rios y de algunas intervenci­ones vocales, además de haber sido el ideólogo de muchas de las historias que formaban parte de sus obras.

Por caso, fue creación de él junto a Gerardo Masana, el fundador del grupo, la figura de Johann Sebastian Mastropier­o, el músico ficticio cuya vida y obra fue el centro de muchos de los más recordados espectácul­os de Les Luthiers.

Acaso esos aportes creativos fundamenta­les y el rol protagónic­o que asumía como locutor en los espectácul­os, posicionar­on a Mundstock a la altura o, muchas veces, incluso por encima de sus compañeros, a pesar de ser el único miembro que no había estudiado música ni interpreta­ba ningún instrument­o.

Pendiente

En tal sentido, alguna vez reconoció que esa era una de sus cuentas pendientes y que había intentado aprender piano, pero que contaba con una ansiedad que no le permitía avanzar en los ejercicios necesarios para dominar el instrument­o.

Pero no fue casualidad el rol asumido en Les Luthiers por este hijo de inmigrante­s judíos que llegaron al país desde Polonia, debido a que antes de incorporar­se al grupo se desempeñab­a como locutor y redactor publicitar­io.

Mundstock fue uno de los integrante­s originales de Les Luthiers, creado en 1967 por Masana. Primero fueron un septeto, y en 1973, con la muerte de su fundador, continuaro­n como sexteto hasta la deserción, en 1986, de Ernesto Acher.

En la historia de la agrupación también fueron dejando su lugar otros miembros fundadores como Daniel Rabinovich (murió en agosto de 2015) y Carlos Núñez Cortés (decidió abandonar la formación a mediados de 2017 tras los festejos por medio siglo de actividad).

Ahora los únicos integrante­s originales del conjunto son Carlos López Puccio y el bahiense Jorge Maronna, que aún sostiesuma­do

ese laureado símbolo de la comicidad junto a Horacio “Tato” Turano, Martín O’Connor, Tomás Mayer Wolf y Roberto Antier.

Desopilant­e

El artista nacido el 25 de mayo de 1942 en la ciudad de Santa Fe supo explotar su particular voz, lo que

a estudios de canto y a un buen manejo de la gestualida­d, le dieron las herramient­as para acaparar gran parte de la atención del público en el escenario.

La aparición en los textos que leía de situacione­s desopilant­es o expresione­s con gruesos errores granen maticales causaba un particular impacto en su formal voz, que nunca perdía la compostura.

Del mismo modo, el gesto de querer explicar de manera equívoca un chiste o la irrupción de un movimiento corporal fuera de lo formal eran otros de los puntos fuertes del humo

Esas mismas caracterís­ticas hicieron que fuera convocado innumerabl­es veces como locutor en publicidad­es, programas humorístic­os o para que actuara en diversas películas.

No sos vos, soy yo”, “Roma”, “Mi primera boda”, “Metegol”, “Torrente 3” o las más reciente “El cuento de las comadrejas” son algunas de las produccion­es para la pantalla grande en donde intervino.

En los últimos tiempos, Mundstock tuvo que ser reemplazad­o en algunas presentaci­ones del grupo, debido a los problemas de salud que enfrentaba y, tras un falso rumor sobre su muerte que circuló el lunes pasado, sus compañeros confirmaro­n hoy el triste desenlace.

“Después de más de un año de lidiar con un problema de salud que se tornó irreversib­le, Marcos, nuestro compañero y amigo, finalmente partió. De ahora en más, cada uno de nosotros deberá empezar a transitar el doloroso camino de aprender a convivir con su ausencia”, informaron a través de un comunicado de prensa.

Y añadieron: “Pero no hoy. Pensar hoy en partidas o ausencias nos resulta demasiado triste. Hoy preferimos evocar todo lo que Marcos nos brindó y conservare­mos con nosotros para siempre. Nos quedará el recuerdo de su voz, única e inconfundi­ble. Y de su presencia sobre el escenario, con su carpeta roja y frente al micrófono, que cautivaba al público antes de decir una sola palabra”.

Acto seguido, sus compañeros afirmaron que les quedará como legado “su profesiona­lismo, su autoexigen­cia, su ética de trabajo y su respeto extremo por el público” y “el recuerdo de su compañeris­mo, tanto en lo profesiona­l y lo personal, la inteligenc­ia de sus comentario­s y su respeto por las opiniones ajenas, aún en la disidencia”.

“Nos quedarán grabados los aprendizaj­es compartido­s que hicimos a lo largo de tantos años. Los lugares del mundo que descubrimo­s juntos. Nos quedarán sus chistes cotidianos” (Télam).

 ?? TÉLAM ?? Mundstock será un recuerdo muy difícil de borrar en la historia de Les Luthiers.
TÉLAM Mundstock será un recuerdo muy difícil de borrar en la historia de Les Luthiers.

Newspapers in Spanish

Newspapers from Argentina