Automotores: tras un abril desastroso, las ventas repuntan en Bahía y la zona
Los precios en dólares son tentadores, pero el cierre de los locales de venta no permitía hacer operaciones. Con la flexibilización de la cuarentena el panorama empezó a cambiar. “Igual, el balance de mayo es regular; eso sí, hay otro ánimo”, dicen.
Tras un mes de abril desastroso para el sector por efecto de la recesión económica y la cuarentena por el Covid-19, las concesionarias de automotores comenzaron a observar durante mayo un leve repunte de las ventas. El dato es alentador no sólo para los empresarios, sino para cientos de empleados de Bahía Blanca y la región que temían que el desplome de la actividad pusiera en riesgo sus fuentes de trabajo.
“Mayo cierra con balance regular. Seguimos lejos de lo que queremos, pero al menos con otra perspectiva”, opinó Luis Gallego, dueño de la concesionaria bahiense Lago y referente en la región de la Asociación de Concesionarios de Automotores de la República Argentina (Acara).
En abril se patentaron apenas 4.414 vehículos en todo el país, una de las peores cifras que se recuerden. Este mes, en cambio, se espera llegar a 18.000, número que seguiría creciendo en junio.
“Hayunelementocentral que explica este repunte: los precios de los autos. Mientras que el dólar se disparó, los rodados tuvieron un aumento de fábrica del 2% al 4% en estos meses. Eso lo están aprovechando tanto los que tienen dólares como los que tienen pesos y no quieren ahorrar en esa moneda”, indicó.
Los valores en dólares de los autos -coincidieron los empresarios de la zona consultados por La Nueva.
son tentadores. “Hoy un cero kilómetro chico cuesta 6.500 dólares; un año atrás costaba 11 o 12 mil dólares. Si comprás hoy
Los concesionarios observan que mucha gente, antes que dejar sus pesos en los bancos, está dispuesta a comprar un auto.
y en los próximos años se acomodan un poco los precios y la economía, capaz que en dos años lo terminás vendiendo por la misma cantidad de dólares. Son cosas de la economía de este país”, se sinceró Gallego.
Su colega Federico Dalmau, dueño de concesionarias en Coronel Suárez y la región, coincidió en que las listas de precios no se actualizaron al ritmo del dólar libre, sino al nivel del “oficial mayorista”.
“Desde 2010 no pasó un mes sin que aumentaran los precios de los autos, pero este año, por ejemplo, no tuvimos saltos mayores al 2% mensual. Por eso hoy con 11 mil dólares te comprás una camioneta que hace 5 años, cuando salió al mercado, costaba 30 mil dólares”, reseñó.
Dalmau enfatizó que la reapertura de los locales comerciales en forma paulatina fue otro factor clave para reavivar las consultas.
“La flexibilización de la cuarentenafueimportante, porque pudimos reanudar la atención de los clientes. Sigue habiendo restricciones, pero la rueda empezó a moverse”, dijo.
El sector espera que en las próximas semanas se vaya normalizando el trabajo de escribanías y el otorgamiento de turnos en los registros automotor. Y, a una escala nacional, que las terminales empiecen a producir nuevas unidades y se destrabe el ingreso de vehículos importados.
“Y si vuelven los créditos accesibles, la venta va a mejorar más”, remarcó.
El empresario Teobaldo Pradilla, de Pigüé, dijo que en la medida en que las terminales “continúen fijando precios acordes al mercado, la mejora se irá dando en forma paulatina”.
“El cliente que hoy está posicionado en dólares está en una situación inmejorable. Hay unidades que hoy se venden por 3.500 o 3.700 dólares, y que hace unos años costaban el triple. Con la suba del dólar cambió todo”, refirió.
Pradilla mencionó que, en usados, los autos con precios de hasta 350 mil pesos se venden sin problema. De allí para arriba -aclaró-, la venta no es tan sencilla porque hablamos de otro poder adquisitivo.
“Mayo fue mejor que abril, pero sigue siendo difícil vender. Hoy tenemos un nivel de consultas que ronda el 30% de un año normal, y estamos en un escenario de incertidumbre. Nadie sabe cómo vamos a terminar cuando esto termine”, enfatizó.
El empuje del campo
Los empresarios consultados también señalaron que el empuje del campo es otro factor que explica el repunte de la actividad en la región durante mayo.
“El campo nunca paró de trabajar, de producir o de tener ingresos -señaló Emiliano López, de Autocenter Pringles, de Jorge López-. Y en comunidades como Pringles, donde casi el 100% de la economía gira en torno al campo, eso fue fundamental”.
“Nosotros seguimos recibiendo consultas y cerrando operaciones con gente de campo y de actividades o negocios que no frenaron por la pandemia, o que incluso hicieron alguna diferencia, tienen la plata guardada y no ven un panorama que los afecte”, señaló.