Fallido intento de ubicarse como víctima
Al declarar en la fiscalía, Alejo Romero dijo que tras la discusión en la casa de su hermano la víctima lo invitó a pelear.
Comentó que González Lagos tenía “algo como un cuchillo o similar” y que en el forcejeó logró arrebatárselo, para luego quedar “como ciego”.
Indicó que advirtió cuando la víctima se desvaneció y vio mucha sangre, por lo que se asustó y salió corriendo.
Agregó que lo que tenía en la mano lo tiró mientras iba caminando y que el destornillador que fue hallado en su mochila no lo utilizó en el hecho.
“Esta versión de los hechos no se corresponde totalmente con la realidad de lo ocurrido”, afirmó el juez Casas en el fallo.
Describió además que los testimonios de los testigos y el informe de las lesiones no se corresponden con lo relatado por el acusado.
Manifestó también que las heridas sufridas por una mujer al intentar separarlos “permite señalar que no fue un acto aislado el uso del elemento punzante contundente, tras quitárselo a la víctima, como señala el acusado, sino que lo utilizó reiteradamente”.
También destacó que ninguna persona dijo haber observado a González Lagos portar un objeto contundente o iniciar la pelea, “dado que, según refirieron, salió a hablar con Romero para aclarar el altercado anterior y fue éste quien comenzó a agredirlo pegándole primero una cachetada”.