La Nueva

Las dietas vegetarian­as, ¿pueden resultar útiles para aliviar el asma?

Un estudio sugiere que una alimentaci­ón totalmente vegetal podría ser una herramient­a poderosa para prevenir y controlar esa enfermedad respirator­ia.

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n fenómeno creciente en el mundo y que da pasos incipiente­s en nuestro país es el de la comida plant-based, que consiste en menúes 100% vegetarian­os, pero con aspiracion­es de alta gastronomí­a. Uno de sus princi- pales impulsores es el chef norteameri­cano Matthew Kenney.

El avance de la cocina plant-based tiene como estímulo los numerosos estudios que avalan el potencial de ciertos alimentos para favorecer la salud y la calidad de vida. En ese contexto, recienteme­nte se dieron a conocer los resulrecom­ienda

Utados de un estudio que sugiere que una alimentaci­ón totalmente vegetal podría aliviar enfermedad­es crónicas como el asma. “Esta investigac­ión innovadora muestra que llenar nuestros platos con alimentos de origen vegetal (y evitar los productos lácteos y otros alimentos ricos en grasas) puede ser una herramient­a poderosa para prevenir y controlar el asma", comentó la doctora Hana Kahleova, del Comité de Médicos para una Medicina Responsabl­e de los Estados Unidos.

En su trabajo publicado en la revista “Nutrition Reviews”, Kahleova y sus colegas concluyen que una dieta basada en plantas puede reducir el riesgo de desarrolla­r la afección y mejorar el control de los síntomas, mientras que, por el contrario, los productos lácteos aumentan el riesgo y exacerban los síntomas.

La doctora Kahleova y sus colegas basaron su investigac­ión en la revisión de un amplio número de estudios que habían analizado las asociacion­es entre el asma y el consumo de

El pescado graso es rico en ácidos grasos omega-3. Por lo que, cuenta con propiedade­s antiinflam­atoria que inciden en las reacciones alérgicas. frutas y verduras, lácteos, huevos y grasas saturadas.

En sus conclusion­es, los investigad­ores escribiero­n: “Los componente­s de la dieta, como los antioxidan­tes, la fibra, los ácidos grasos poliinsatu­rados, las grasas totales y saturadas, y el consumo de vitamina D probableme­nte afectan las vías inmunes involucrad­as en la fisiopatol­ogía del asma. Sin embargo, los ensayos de intervenci­ón para evaluar la prevención y el control del asma por medios dietéticos son necesarios para confirmar estas asociacion­es".

Sus hallazgos confirman recomendac­iones dietarias previas: si bien hasta ahora ninguna asociación médica relacionad­a con la medicina respirator­ia recomienda una dieta 100% vegetal, es cierto que se

“Nuestro estudio muestra que comer pescado tan solo dos veces por semana, puede disminuir la inflamació­n pulmonar en niños con asma” señalaron. un alto consumo de frutas y verduras que contengan sustancias antioxidan­tes.

Como explica la Clínica Mayo en sus recomendac­iones para pacientes con asma, “las frutas y verduras son una buena fuente de antioxidan­tes, como el betacarote­no y las vitaminas C y E, que pueden ayudar a reducir la inflamació­n y la irritación pulmonar que provocan unas sustancias químicas que dañan las células conocidas como radicales libres”.

La Fundación Argentina del Tórax, por ejemplo, recomienda no una dieta vegetaría, sino una dieta mediterrán­ea en contraposi­ción a la clásica dieta occidental: “Los resultados de varios estudios sustentan la hipótesis de que la dieta occidental (cuyos componente­s principale­s son carnes, harinas refinadas, postres, “comidas rápidas”) es un factor de riesgo de asma. En contraste, la dieta Mediterrán­ea ejerce un papel protector”. La dieta Mediterrán­ea, rica en frutas y vegetales, también contiene pescado, frutos secos, aceite de oliva y quesos.

Lo que sí destacan los expertos de la Fundación Argentina del Tórax es el peso negativo de una dieta con exceso de grasas animales en los pacientes con asma.

“Un estudio mostró una correlació­n entre la grasa de la dieta y el asma. Un grupo de 40 pacientes con asma se alimentó con una dieta de bajo (13%) o alto (52%) contenido en grasa. Se observó que inmediatam­ente después de haber ingerido la comida rica en grasa aumentaban las células inflamator­ias en el esputo. Este hallazgo es muy importante si se tiene en cuenta que el asma es una enfermedad caracteriz­ada por la inflamació­n de las vías respirator­ias”.

PARA FAVORECER LA CALIDAD DE VIDA

La Fundación Argentina del Tórax, por ejemplo, recomienda una dieta mediterrán­ea en contraposi­ción a la clásica dieta occidental.

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ARCHIVO LA NUEVA.

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