Lo condenaron por ingresar a robar en la casa de un detenido con drogas
Cristian Rondina Lavandero recibió 2 años de cárcel tras ser arrestado por acceder a la vivienda de Damián Eguren, vinculado al secuestro de casi 2 kilos de cocaína. El hecho se produjo poco después de un allanamiento en el inmueble.
Cristian Maximiliano Rondina Lavandero fue noticia a mediados de este año, pero no solo por ser atrapado en vinculación con un robo.
El caso cobró mayor trascendencia porque fue sorprendido intentando sustraer elementos de una vivienda que había sido allanada pocas horas antes, en la que residía uno de los detenidos durante un operativo en el que la policía secuestró algo más de un kilo y medio de cocaína y gran cantidad de dinero.
En las últimas horas, y en el marco de un juicio abreviado, el juez del Tribunal en lo Criminal N° 1, Cristian Yesari, le impuso la pena de dos años de prisión.
Previamente, el fiscal y el defensor, con la aceptación del procesado, habían acordado la sanción y calificación legal del hecho.
Para el magistrado está probado que el pasado 18 de junio, alrededor de las 23, el imputado accedió a un inmueble ubicado en Alsina al 3800, donde vivía Damián Eguren.
Los investigadores determinaron que Rondina Lavandero escaló un paredón de más de dos metros de altura e ingresó al patio trasero de la casa, para luego forzar con una barreta la parte inferior de una persiana de metal y abrir la ventana de uno de los dormitorios.
En esas circunstancias dejó preparados varios elementos (ropa y electrodomésticos) dentro de una manta con la intención de sustraerlos.
La llegada de los hermanos del dueño y el aviso al teléfono de emergencias 911 permitió que efectivos del Comando de Patrulla lo interceptaran cuando in
El hecho se produjo el pasado 18 de junio, en un inmueble ubicado en la zona de calle Alsina al 3800.
tentaba escapar.
Sorpresa y persecución
Dos hermanos de Eguren declararon que habían concurrido al domicilio para alimentar a los perros y asegurarse que la casa estuviera cerrada luego del allanamiento realizado por la policía.
Explicaron que al arribar hallaron la puerta del frente trabada y escucharon ruidos provenientes del interior, por lo que se asomaron y observaron a una persona escapar por el patio.
Señalaron que uno de ellos se comunicó de inmediato con el 911, mientras que el otro comenzó a perseguir al sospechoso, quien finalmente fue atrapado en Pilmayquén y Alsina.
Tanto los familiares del propietario como los efectivos que participaron del procedimiento mencionaron que en la parte trasera del inmueble hallaron una barreta metálica y una mochila con herramientas.
Los testigos señalaron además que un segundo sujeto habría intervenido en el robo, ya que al intentar acceder a la casa escucharon que una persona le decía a otra “vámonos, vámonos, ahí vinieron”.
De todas maneras, ambos admitieron no haber visto al supuesto cómplice de Lavandero.
El propio Eguren dijo que se enteró del robo estando detenido y que hacía alrededor de un año que residía en esa vivienda.
Dijo que entrenaba
Tras su arresto el imputado declaró en la fiscalía y dijo que la causa fue “armada para perjudicarme”.
Señaló que esa noche estaba haciendo ejercicio en el barrio y que un patrullero lo detuvo a pocas cuadras de su casa.
Argumentó que practicaba boxeo y que todos los días corría alrededor de una hora, realizando siempre el mismo trayecto.
Agregó además que los hermanos de Eguren dijeron no haberlo identificado y que la policía lo solía detener para identificarlo porque lo conocían.
Las pruebas
Al momento de analizar la prueba, el juez Yesari indicó “que se encuentra acreditado que Rondina Lavandero resulta responsable del hecho en calidad de autor”.
Destacó que el imputado fue identificado por los hermanos del dueño de la vivienda (uno lo persiguió), quienes además reconocieron las prendas de vestir que llevaba colocadas.
“Este reconocimiento expreso y categórico de los testigos no puede ser conmovido en su vigor y eficacia probatoria por los dichos del encausado al momento de prestar declaración”, agregó el magistrado.
Sobre la versión ensayada por el procesado, indicó que no guarda “comprobación ni acreditación alguna a través de otros elementos de prueba distintos de su propio relato”.
Por todo ello, condenó a Rondina Lavandero por el delito de tentativa de robo agravado por escalamiento y lo declaró reincidente.