Un cruce peligroso para llegar a la sala médica, el merendero y una escuela
Los vecinos de barrio Evita cruzan por un acueducto para ir a la sala médica y merendero de Villa Esperanza.
Los vecinos de Villa Esperanza y barrio Evita reclamaron la construcción de una plataforma segura sobre el arroyo Napostá que les permita unir ambos sectores. Es que diariamente corren serios riesgos al utilizar una estructura metálica como puente improvisado -por donde pasa un acueducto de gran porte que abastece al Polo Petroquímico- para poder acceder a un merendero, la sala médica y hasta una escuela ubicada en ese punto de nuestra ciudad.
Vecinos de Villa Esperanza y barrio Evita alertaron sobre los riesgos que corren al utilizar una estructura metálica como puente improvisado para cruzar el arroyo Napostá y acceder a un merendero, la sala médica y hasta una escuela de ese sector de la ciudad.
Por ello, solicitaron a las autoridades pertinentes la construcción de una plataforma segura que permita unir ambas barriadas.
En avenida Independencia 3050 (a la altura de la rotonda que da inicio a la autopista Bahía BlancaPunta Alta) existe un acueducto de gran porte que abastece al Polo Petroquímico y que ABSA, hace un par de años, revistió con una estructura metálica sin piso.
“Los vecinos empezaron a utilizarlo como cruce, pero obviamente no es esa su función. Hacen malabarismo sobre los hierros cruzados o bien pisando el caño, ya que carece de barandas para agarrarse”, comentó Damián Cabodevilla, referente de la agrupación Renovar Bahía y quien canalizó la inquietud de los habitantes de ambos barrios para presentar un pedido ante el Concejo Deliberante.
De ese modo, las personas evitan dar una vuelta de alrededor de 10 cuadras para acceder al merendero Sueños de Esperanza, la sala médica ubicada en Berutti 2980 o la escuela 45 del barrio 5 de Abril.
“El problema se agrava antes del amanecer y cuando anochece, ya que tampoco hay luminarias en esa zona. Incluso, los vecinos nos hicieron referencia a que hubo personas que se cayeron al arroyo y que una hasta sufrió lesiones, ya que tiene poco más de tres metros de altura. Aunque el arroyo en esa parte no tiene mucha profundidad, si se cae un niño puede suceder una tragedia aún mayor”, añadió el trabajador social.
El paso más cercano, habilitado, está a alrededor de 10 cuadras de ese puente improvisado, ya en Villa Rosario.
“Le pedimos a la autoridad pertinente que se realice un puente peatonal con la luminaria y la protección necesaria. Otra opción es, con el aval de ABSA, utilizar la base de esa plataforma metálica y acondicionarla de tal modo que los vecinos no corran tantos riesgos”, dijo María
Candela Ocampo, miembro de la ONG "Creando Puentes".
Mirta Orioli, una vecina del barrio Evita, señaló que se sienten olvidados.
"Este es un barrio muy humilde, pero de gente trabajadora. Todos los días tenemos que ver como nuestros chicos cruzan hasta gateando por ese puente para evitar caerse al agua. En cualquier momento puede pasar una tragedia”, manifestó.
"Hacen malabarismo sobre los hierros cruzados o bien pisando el caño, ya que carece de barandas para agarrarse”.