Alta alcurnia y trágico destino: a 110 años de la apertura del “Titanic” serrano
El 11 de noviembre de 1911 el Club Hotel de la Ventana abrió sus puertas para las familias más ricas de la época.
Paredes desgastadas, derruidas e incompletas; manchas de humedad, agujeros (donde antes había aberturas de lujo), techos ausentes.
Cuesta imaginar, a partir de lo que queda en pie, cómo fue hace 110 años, el famoso Club Hotel de la Ventana, aquel lujoso complejo turístico ideado para brindar servicios de alta gama a la élite argentina y europea en el período histórico conocido como la Belle Epoque.
Este patrimonio cultural de Villa Ventana, hoy en ruinas, es una invitación a ejercitar la imaginación, a trasladarnos a aquella inauguración oficial del 11 de noviembre de 1911, en la cual estuvieron presentes la mayoría de las familias más acaudaladas y poderosas de la Argentina, la generación del 80, gente vinculada al pensamiento roquista.
Anteayer se cumplieron 110 años del primer evento que tuvo lugar en este gigante de las sierras que tuvo un fugaz apogeo y un vertiginoso y trágico destino, por lo cual, se lo suele comparar con Titanic, crucero de la alta sociedad que se hundió en 1912, luego de impactar contra un iceberg.
Pablo Parotti, guía turístico de la Municipalidad de Tornquist, encargado de realizar las visitas a las ruinas, explicó que el Ferrocarril del Sur, el inversionista de esta obra, pensó en el hotel como un lugar donde llevar a la clase alta argentina y familias de la Belle
Epoque europea.
"La construcción arrancó en 1904 y, el 11 de noviembre de 1911, después de 7 años de construcción y de importar materiales de primer nivel desde el Viejo Continente, tuvo lugar la fiesta inaugural. Lo más iny teresante es que esta fecha no marcó el inicio de la vida hotelera. El hotel recién abrió sus puertas el 1 de diciembre", contó.
Por eso, en la comarca, suelen recordar y celebrar dos fechas: la de su inauguración, el 11 de noviembre, la de su apertura real, el 1 de diciembre.
¿Cómo fue aquella fiesta inaugural del hotel que contó con uno de los primeros casinos de Sudamérica?
"Fue una fiesta muy europea, con el catering realizado por el Hotel Plaza de
Buenos Aires, que era propiedad de Ernesto Tornquist, con un menú internacional", contó.
El sitio era tan suntuoso que hasta se construyó un ramal ferroviario, La Trochita, para trasladar hasta sus puertas a los