Dos ciclos bien pensados
Entre las actividades que con más fuerza abonó Fernando Belzagui a lo largo de su carrera, sin dudas hay tres ciclos que llevan su impronta y que definen a la perfección su estilo de trabajo. Veladas cuasi literarias
Durante ocho años, en un bar del Paseo de las Artes, Belzagui se transformaba en una suerte de anfitrión a la medida de Creppe Georgette (el mítico presentador del programa uruguayo Hiperhumor en el sketch Veladas
Paquetas). Se trataba de un show donde había lectura de textos literarios de autores cordobeses, amenizados con música en vivo. Este año parece que habrá novena temporada.
Vereda tomada
La intervención en la vereda de la calle Achával Rodríguez comenzó de manera azarosa, cuando los hermanos Belzagui pusieron a la venta una batería en un garaje. Mientras encontraban comprador, la batería empezó a sonar los fines de semana, y al instrumento se le fueron sumando músicos. Finalmente quedó instalado un ciclo dominical al caer el sol en el que Fernando aprovechaba para convocar a músicos y al público. Durante los cinco años que duró, jamás se cortó la calle (la instalación de la banda sólo ocupaba el lugar de un auto estacionado en la calle) y el público contemplaba el espectáculo desde la vereda del frente. Nunca se infringió una norma, según relata el organizador.
A la pregunta de si es posible un regreso del ciclo, Belzagui revolea los ojos y sonríe.