LOS LADOS DE LA ESCRITURA
EL ESTILO DE SUS RELATOS Y EL DE SUS TEXTOS PERIODÍSTICOS.
Rodolfo Walsh le revela a Ricardo Piglia en una entrevista de 1970 que los tres cuentos ambientados en el internado católico irlandés de fines de la década de 1930 formaban parte de un proyecto más ambicioso, una novela, y que ya tenía bocetados algunos capítulos y hasta el título de uno de ellos. Una novela improbable.
Los cuentos son: “Irlandeses detrás de un gato”, “Los oficios terrestres” y “Un oscuro día de justicia”, escritos entre los años 1964 y 1967. Tienen un espacio común y los motivos dramáticos y los personajes, efectivamente, se vinculan, se retroalimentan. El estilo de la prosa es similar, según la particular perspectiva del autor, un lenguaje grandioso y grandilocuente, acorde a la pequeñez de las anécdotas, al carácter poco épico de las acciones. En “Los oficios terrestres”, esa exuberancia verbal se modera algunos grados. Y es en este relato, el más breve de los tres, donde se evidencia con nitidez la, quizás algo tardía, influencia literaria del Walsh de ese período, la literatura norteamericana de las primeras décadas del siglo 20, que algunos teóricos de ese país denominan literatura de la sordidez: William Faulkner, John Dos Passos, Upton Sinclair.
Walsh manifiesta en esa misma entrevista su incertidumbre respecto al momento histórico en el cual se halla la novela en general, entendiéndola como un artefacto que ha encontrado su límite en relación a su intervención pública, que ya “no molesta” en tanto se lo sacraliza como arte. Dice que los escritores de “derecha” se sacan el problema de encima ya que plantean el problema de este lado, lo cual se entiende como el lado de la estética pura. Ahora bien, desde mi punto de vista su obra más singular es el resultado, entre otros aspectos, de una puja que el polifacético autor libró con su escritura y con el acto político de escribir.
Si según Walsh los temas sin épica de la saga de los sufridos pupilos irlandeses requerían un estilo exuberante y destemplado, se deduce que otros trances, más históricos, más sociales reclamaban un modo racional y mesurado, un modo más equilibrado de concebir y plasmar el mundo. Esta es una pista para escrutar la prosa firme, decidida y aireada de la trilogía de no ficción que se inició con Operación Masacre. Y el interés que despierta esa sección de su obra deriva de haber situado la discusión, tal como él sostenía el dilema, en “los dos lados” de la colisión entre ética y estética. Los escritores Sergio Gaiteri y Martín Kohan (foto) y el periodista Pablo Ramos hablarán sobre la obra y el legado de Rodolfo Walsh, a 40 años de su desaparición, en la librería Portaculturas. La cita es el viernes 31 de este mes a las 19. Galería Caribú, Belgrano 884, local 4.