Escándalo travesti. Una biblioteca de literatura trans
REDES. Se trata de la primera plataforma cordobesa para difundir literatura trans. Tiene venta de libros, archivos de autores y reseñas. Su creadora cuenta cómo surgió la idea.
“Escándalo travesti” es una plataforma que propone una curaduría LGBTQIA+ sobre textos de autoras y autores de identidades disidentes que rara vez tienen llegada masiva. Surgió de la necesidad de Vir del Mar Mainardi de hacer escuchar nuevas voces en lo que ella define en lenguaje inclusivo como “autorxs trans”.
Entonces creó una web que le permite compartir pareceres, tejer lazos con editoriales trans, difundir a artistas y, a su vez, vender textos.
“Vengo del teatro, soy licenciada en teatro. Soy ávida lectora desde muy chiquita y este proyecto nace de ese rol de librera amateur que tenía con mis amigues más cercanes, a los que siempre les recomendaba libros”, cuenta sobre el germen de este deseo, que dice fue construido colectivamente gracias al apoyo de sus pares.
Fue entonces cuando esas recomendaciones amateur se fueron transformando en curadurías de textos transfeministas. Y agrega: “Por eso hay gays, maricas, personas trans, travestis, no binaries, lesbianas… todas las identidades disidentes. Este es el colectivo del que formo parte desde siempre y, con distintas etiquetas, el que voy transicionando”.
Todo suma
Sobre la necesidad de hacer escuchar otras voces, asegura que nació de su deseo de poder leer a otras personas trans y travestis: “Quería poder verme reflejada o interpelada en otros autorxs que no son los clásicos varones CIS (por cisgénero) que he leído siempre, porque quizás no comparto la experiencia o la visión de mundo con ellos”.
Si bien en muchos artículos se consigna que la llamada “literatura trans” ha ganado terreno y ha copado los catálogos de las editoriales y los estantes de la librería, lo cierto es que su llegada al público concreto es todavía muy menor.
Sin contar de que hablar de “literatura trans” no es hablar de un compartimento estanco y cerrado en el que hay un solo tipo de prosa, sino que –por el contrario– en ese rótulo entran crónicas, ensayos, poesías y ficción. Muchos de esos textos están atravesados por un fuerte carácter autobiográfico porque, como dice el autor trans I Acevedo, “nadie elige qué escribir”, como tampoco se elige dónde nacer o en qué clase social.
En el último tiempo Las malas de Camila Sosa Villada (libro que lleva más de un año como uno de los más vendidos) ha impulsado cierto interés por escritores trans, pero todavía falta mucho.
Por eso, además del deseo y la necesidad individual de Vir del Mar Mainardi hay una postura política de comenzar a ocupar espacios.
“Tengo la convicción muy grande de que tenemos que empezar a estar a la vista del público. Salir de ese lugar al que se han relegado nuestras identidades que es la noche, el gire, y poder empezar a ocupar todos los espacio que queramos. Y si ese espacio es la noche y el gire, esta bien, pero que ésa sea una de todas las opciones”, dice.
Y agrega: “Las travestis tenemos que estar en todos los mostradores, en todos los colectivos, en las universidades, es las escuelas y en este caso, por qué no, en las librerías”.
Consultada sobre la posibilidad de que nuevas y nuevos autores se le acerquen para compartir su material, Vir asegura: “Encontrar voces trans es difícil, porque somos pocxs y morimos, promedio, antes de los 40 años. Las oportunidades de acceso a la educación y al trabajo formal son escasas y difíciles. Es un problema estructural”. Si bien dice que falta mucho por hacer, se muestra optimista de este primer paso.