Brasil dice que está preparado para prevenir atentados
El Gobierno detuvo ayer a 10 sospechosos que planeaban actos terroristas durante los Juegos Olímpicos de Río 2016. Todos son de origen brasileño, y seis de ellos habían jurado fidelidad al Estado Islámico.
Brasilia. Pese a calificarlos de “aficionados y desorganizados”, el Gobierno de Brasil aseguró ayer que la captura de 10 sospechosos de planear actos terroristas para los Juegos Olímpicos de Río 2016 es prueba de que el país “está atento a cualquier amenaza”.
“Le mostramos al mundo que tenemos una intensa cooperación con agencias de inteligencia internacionales”, que ayudaron en la detención de 10 simpatizantes del grupo yihadista Estado Islámico (EI), explicó el ministro de la Presidencia, Eliseu Padilha.
El ministro, uno de los hombres de más confianza del presidente interino de Brasil, Michel Temer, comentó que recibe cada día información detallada sobre el trabajo de los responsables de la seguridad de los Juegos Olímpicos, que serán inaugurados el 5 de agosto en Río de Janeiro. “Brasil vigila todo movimiento sospechoso y cada persona que llega al país es fiscalizada”, apuntó.
La detención de los 10 sospechosos de terrorismo fue confirmada por el ministro de Justicia, Alexandre de Moraes, quien los tildó de “aficionados y desorganizados”. No obstante, aclaró que “ninguna fuerza de seguridad seria puede ignorar el asunto” por la aparente falta de coordinación del grupo, el cual era investigado desde abril y habría estado en “plenos preparativos” para ejecutar un atentado durante los Juegos Olímpicos.
Según De Moraes, en mensajes que intercambiaban a través de internet, los sospechosos habían acordado iniciar “entrenamientos en artes marciales y tiro” e incluso gestionaban la compra de un fusil AK-47 con vendedores clandestinos de Paraguay.
Explicó que los detenidos, todos brasileños y entre los que figura un menor de edad, “no tenían contacto personal”, pero se comunicaban a través de redes sociales como WhatsApp y Telegram, y llegaron a entablar comunicación directa con la organización yihadista por esos medios.
“Algunos tuvieron al menos un contacto con el Estado Islámico para una especie de bautismo, para un juramento de lealtad”, indicó De Moraes.
Asimismo, en sus mensajes exaltaban las actividades terroristas del EI, intercambiaban videos sobre ejecuciones realizadas por esa organización terrorista y llegaron a celebrar los recientes atentados en Orlando (Estados Unidos) y Niza (Francia).
Uno de los detenidos pretendía viajar al exterior para “hacer un contacto personal” con miembros de ese grupo terrorista, pero desistió porque no tenía condiciones financieras, indicó el ministro.
En los mensajes que fueron interceptados por las autoridades de inteligencia, los detenidos solían indicar que Brasil no era un objetivo del terrorismo, pero que “en virtud de la proximidad de los Juegos Olímpicos pasaba a estar dentro de los blancos”.
Los involucrados integraban un grupo virtual denominado Defensores de la Sharia.
El operativo involucró a 130 agentes que cumplieron 10 órdenes de arresto temporal, dos conducciones forzadas a declarar y 19 acciones de búsqueda y aprehensión de materiales en 10 estados del país. Todos permanecerán 30 días en régimen de reclusión.
Ante la creciente preocupación por la posibilidad de que ocurran atentados durante la mayor cita deportiva del planeta, De Moraes insistió en lo dicho días atrás: que la delincuencia en las calles preocupa más a las autoridades que el terrorismo. “La seguridad pública nacional es mucho más importante que el terrorismo, genera más preocupación”, sostuvo.