El paro de CTA condiciona a una CGT que también mira a Massa
La conducción de la Confederación General del Trabajo (CGT) transcurre en medio de fuertes presiones sindicales y hasta políticas las 72 horas previas a lo que sería su última y definitoria reunión con el Gobierno nacional, antes de definir una fecha para una huelga general contra la política económica y social de la administración macrista.
Por un lado, la corre “por izquierda” la Central de los Trabajadores Argentinos (CTA). Por otro, ayer el diputado Sergio Massa –a quien están vinculados dos de los tres integrantes del triunvirato que conduce la CGT– salió a ponerle paños fríos a un paro.
En efecto, la Asociación de Trabajadores Estatales (ATE), junto con los sindicatos de docentes de todo el país y de todos los niveles, y de profesionales de la salud, convocó para hoy a una huelga de 24 horas en reclamo, sobre todo, de la reapertura de paritarias, que es a la vez una de las demandas del triunvirato que conduce la CGT.
La capacidad de convocatoria será una de las cuestiones que quedarán expuestas hoy. El dato sobresaliente es que si bien los sindicatos convocantes pertenecen a las CTA, también aparecen la Unión de Docentes Argentinos (UDA) y el Sadop, de docentes privados, que integran la CGT.
La CTA prevé reunirse con la CGT el jueves –tras la reunión del triunvirato cegetista con el ministro de Hacienda, Alfonso Prat Gay– o el viernes. Y considera que, si no hay acuerdo, las dos CTA definirán la semana próxima su fecha de paro junto con un sector del gremio bancario.
Massa, líder del Frente Renovador, instó a su vez a que el Gobierno y la CGT “agoten las instancias de diálogo” porque el paro “no es el mejor camino; en todo caso, es el final de una negociación fallida”. El pronunciamiento de Massa, a cuyo sector pertenecen los triunviros cegetistas, a la vez que el diputado nacional Héctor Daer y el bonaerense Carlos Acuña, contrastó con la posición de Cristina Kirchner, quien la semana pasada prefirió hacer silencio en lugar de opinar sobre la realización o no de la medida.