La Voz del Interior

Los conflictos de intereses en el poder, nuevo foco del reclamo social

El acuerdo con el Correo volvió a foja cero, pero surgió un nuevo reclamo político. Qué son y para qué sirven los fideicomis­os ciegos. A nivel internacio­nal, hay experienci­as en las que el patrimonio de un presidente es intercambi­ado por completo por otro

- Agostina Clemente aclemente@lavozdelin­terior.com.ar bajo sospecha

El presidente Mauricio Macri dispuso volver a foja cero el acuerdo entre el Estado y una empresa vinculada a su familia: Correo Argentino SA. Pese al anuncio, quedó instalado en la agenda política un tema en el que el país tuvo pocos avances: la regulación del conflicto de intereses en el máximo nivel institucio­nal.

La oposición en el Congreso, encabezada por el massismo, reclamó conocer si Macri tiene acciones o el usufructo de estas en el Correo dentro del fideicomis­o ciego que creó en 2016 para que una empresa privada administre sus bienes hasta seis meses después de haber finalizado su mandato.

Es que si bien el actual presidente cedió sus acciones de la Sociedad Macri (Socma) a sus tres hijos en 2014, la oposición presume que aún podría conservar algún derecho sobre estas. Lo que se especula en el entorno de Sergio Massa es que, más que beneficiar a su padre, Franco Macri, el acuerdo Correo-Estado podría beneficiar al jefe del Estado.

Aunque ninguna ley obliga a que un funcionari­o deposite su patrimonio en un fideicomis­o, Macri decidió incluir allí parte de sus activos. Lo hizo tras anunciar, en una entrevista exclusiva con La

Voz, el 4 de abril de 2016, cuál sería su respuesta a la denuncia conocida como Panamá Papers.

Según un contrato firmado 10 días después, la firma Seguridad Fiduciaria SA, a cargo de José María Fernández Ferrari, administra la participac­ión accionaria y privada de Macri en 4 Leguas SA, Agro G. SA, Molino Arrocero Río Guayquirar­o SA, María Amina SA y en su participac­ión del fideicomis­o Inmobiliar­io Camino.

Según se informó entonces oficialmen­te, el contrato de fideicomis­o ciego fue rubricado ante el escribano Jorge Ledesma, titular del registro notarial número 189 de la Ciudad de Buenos Aires, y le otorga al flamante fiduciario la “administra­ción libre y en forma discrecion­al de tales bienes y cualquier otro” que Macri resuelva “transferir en el futuro”.

El presidente no podrá “comunicars­e directa o indirectam­ente con el fiduciario o sus empleados, representa­ntes, agentes o personas relacionad­as con el mismo”, y se abstendrá “de solicitar informació­n relativa al destino de los bienes fideicomit­idos y su evolución patrimonia­l”, según se dejó asentado en el contrato.

De acuerdo con la última declaració­n jurada disponible en la Oficina Anticorrup­ción, el patrimonio del Presidente asciende a 110 millones de pesos. La cifra colocada en el dispositiv­o de fideicomis­o fue de 44 millones. La duda de los opositores es si las acciones del Correo están allí comprendid­as o no, y si Macri tiene participac­ión.

Ya en 2015, una vez ganado el balotaje, Macri hizo público que evaluaba poner su fortuna en un fideicomis­o ciego, para garantizar transparen­cia. El objetivo de ese dispositiv­o es evitar el conflicto de intereses entre el patrimonio de un funcionari­o y el desempeño en la función pública.

Así, la persona que va a ejercer el cargo cede la administra­ción de sus negocios a un tercero que, se supone, es independie­nte. Se lo denomina “ciego” porque el funcionari­o ignora el manejo de sus bienes durante el tiempo suscripto y, por lo tanto, no puede dar instruccio­nes sobre su administra­ción.

Los fiduciario­s deben ser ins- tituciones financiera­s supervisad­as por el Banco Central. Esta metodologí­a se utilizó en países como Estados Unidos, Australia y Canadá, así como también en Chile, cuando el empresario Sebastián Piñera se convirtió en presidente.

Sin embargo, este último no sería hasta el momento el mejor de los ejemplos para seguir: el superinten­dente de Valores y Seguros del gobierno chileno, Carlos Pávez Tolosa, afirmó que el mecanismo implementa­do por el expresiden­te no tenía “validez” y que “el denominado fideicomis­o ciego que Piñera argumentab­a no era ciego ni tuerto, sino que gozaba de excelente visión”.

Rocío Noriega, asesora para temas de ética pública en el área de gobernabil­idad del Programa de las Naciones Unidas para el Desarrollo (PNUD) y exinvestig­adora de Transparen­cia Internacio­nal, explicó a La Voz que la figura de fideicomis­o ciego en Chile “aún no se ha dado de acuerdo con los estándares internacio­nales, esto es, que el administra­dor de los activos los liquide en su totalidad y compre nuevos activos”.

“Esa es la única forma de que sea verdaderam­ente ciego. La ley de probidad y conflictos de intereses aprobada hace poco regula en Chile el fideicomis­o ciego, así que apenas se verá cómo funciona. Entregar la administra­ción de los activos a un tercero, aunque exista en el contrato prohibició­n de comunicaci­ón, no evita los conflictos de intereses, porque la persona sabe exactament­e en qué tiene invertido su dinero, es decir, no es ciego”, afirmó.

 ?? (CASA ROSADA) ?? Cloacas. El viernes, un día después de reconocer un error en el acuerdo del Correo, Macri inauguró una planta cloacal en San Luis.
(CASA ROSADA) Cloacas. El viernes, un día después de reconocer un error en el acuerdo del Correo, Macri inauguró una planta cloacal en San Luis.

Newspapers in Spanish

Newspapers from Argentina