Los desafíos que tiene por delante la UNC
Juan Carlos Carranza
Ya en plenas funciones, y con la sensación de haber cumplido su promesa de campaña de propiciar la sanción de la elección directa de las autoridades unipersonales de la Universidad Nacional de Córdoba (UNC), el rector Hugo Juri quiere concretar los proyectos que lo entusiasmaron para decidirse a volver al ruedo.
Ahora quiere que sus aliados se encarguen del proceso político que desembocará en las siete elecciones de decanos de junio, para dedicarse a las iniciativas académicas que lo trajeron de regreso a la conducción de la Casa de Trejo.
La semana pasada se reunió con los decanos para apurar los detalles de las elecciones decanales y pidió que el reglamento electoral sea lo más simple posible, de manera que, si hay que corregirlo, no sea un trámite engorroso.
Suscribió la idea del decano de Ciencias Agropecuarias, Marcelo Conrero, de aplicar la boleta única. Insiste en que son los propios titulares de las facultades los que están más al día con los quehaceres electorales y son ellos los más capacitados para resolver las dificultades que se presenten en esta inédita forma de elegir, en forma directa.
Convenios y proyectos
La actual gestión rectoral quiere reforzar algunas alianzas a las que considera estratégicas para llevar adelante ciertos proyectos académicos.
Uno de ellos se vincula con la Comisión Nacional de Actividades Espaciales (Conae), entidad con la que la UNC avanza en un convenio para generar un doctorado. Conae necesita una universidad de base para brindar esta capacitación y la Casa de Trejo está interesada en que sus graduados manejen tecnología espacial y satelital.
Otra de las alianzas es con la CGT. Con la central de trabajadores, Juri quiere multiplicar la oferta de capacitación en oficios, un éxito sin precedentes en cuanto a demanda. La iniciativa tiene 6.500 aspirantes y sólo 450 plazas.
Los gremialistas están muy interesados en que la UNC pueda validar la experiencia de sus trabajadores y, en ese ida y vuelta, nutrirse del conocimiento de la casa de estudios. Unido a esto, Juri ya piensa en cómo llevar esta escuela de oficios al interior, y el canal más directo son los sindicatos municipales y los propios municipios.
El modo en el que la UNC está pensando certificar el conocimiento de estos espacios es a través del sistema de “créditos académicos”.
En los primeros días de marzo comenzarán a dictarse los primeros trayectos académicos con los sindicatos de los municipios. El puntapié inicial será en la Municipalidad de Río Ceballos, donde la Secretaría de Extensión pondrá en marcha esta sinergia entre docentes universitarios y empleados municipales.
En este marco, esta semana la UNC será sede de un encuentro vinculado al llamado Sistema Nacional de Reconocimiento Académico, implementado por la Secretaría de Políticas Universitarias de la Nación y al que ya adhirieron más de 60 universidades, entre públicas y privadas.
La iniciativa intenta mejorar las cifras de retención de estudiantes, pues propicia que los estudiantes que cambien de carrera no pierdan su trayectoria académica anterior.
En la UNC, las primeras carreras que implementarán los “créditos académicos” serán las ingenierías y las informáticas.
Resistencia
Por ahora, algunas federaciones docentes, como Conadu Histórica, rechazan este sistema y señalan que es un atentado contra la “libertad de cátedra”. Los gremialistas reconocen que hay que buscar un modelo académico alternativo, en función del desfase entre los nuevos ingresantes (todos nativos digitales) y el cuerpo docente, pero no creen que los “créditos” sean el camino.
El desafío para autoridades y docentes será encontrar la forma de superar esas barreras. Para algunas cosas, se necesitan más fondos; para otras, no.
Juri quiere dedicarse a los proyectos que lo motivaron a ser de nuevo rector.