La tristeza de ganar pese a todo
Del Potro consoló a su rival Nicolás Almagro y su gesto conmovió a París. Juan Martín habló desde la experiencia.
“Si hay alguien que entiende esos malos momentos puedo ser yo y no se los deseo a nadie”, dijo Juan Martín Del Potro tras intentar consolar a su rival Nicolás Almagro, después de que el español abandonase el juego de segunda ronda de Roland Garros por una lesión en la rodilla izquierda.
Cuando vio que su rival ya no podía más, “Delpo” cruzó la cancha para consolar al murciano de 32 años, y la imagen dio la vuelta al mundo. Lo que no se pudo escuchar es qué le dijo el argentino, que se mostró tan compungido que no pudo ni esbozar una sonrisa pese a haber accedido a la tercera ronda del segundo Grand Slam del año, donde se cruzará con el número uno del mundo, Andy Murray.
“Traté de encontrar buenas palabras en ese momento, decirle que mantuviese la calma, que pensase en su familia, en su hijo. A veces la salud es prioritaria a un partido de tenis”, contó luego el jugador que ha sufrido de cerca el calvario de las lesiones, que de hecho lo alejaron del Abierto parisino por cinco años. “Tenía una tristeza muy grande y me hizo mal”, reveló.
El partido terminó después de 90 minutos de juego, cuando el marcador estaba 6/3, 3/6, 1-1 y 150 con el tandilense al servicio.
“No es lindo terminar un partido así (...) Te queda una sensación fea por ver a un rival, a un gran tipo sufriendo”, insistió “Delpo” y aseguró: “En esas situaciones el tenis es secundario. La salud es lo primero, hay cosas lindas fuera del tenis para salir adelante. Ojalá se recupere pronto”.
Otra suerte corrieron Nicolás Kicker y Renzo Olivo, quienes en sus compromisos de segunda ronda cayeron frente a Pablo Cuevas (triple 6/4) y Kyle Edmund (7/5, 6/3 y 6/1), respectivamente.
La tercera ronda en París comenzará a disputarse hoy, y hay dos argentinos en carrera: el marplatense Horacio Zeballos abrirá el juego frente al belga David Goffin, a las 6. Diego Schwartzman se medirá con el serbio Novak Djokovic, alrededor de las 8.
Para ambos, es la primera vez en jugar la tercera ronda de Roland Garros, mientras que para Argentina significa la primera vez, desde 2012, en tener más de un representante en esta fase.