El viaje de De la Sota y el rol que su sector tendrá en la campaña que se viene
La imagen se viralizó en las redes sociales. El domingo por la noche, cuando se comenzaron a conocer los resultados oficiales de las Paso, apareció una foto de José Manuel de la Sota mientras embarcaba en Ezeiza en un vuelo hacia Río de Janeiro.
Si bien nadie saldrá a cuestionarlo públicamente, en la interna peronista no cayó bien la decisión del exgobernador de viajar al exterior en la misma noche del domingo.
También habían hecho ruido en el PJ las declaraciones de De la Sota cuando fue a votar, en Río Cuarto. El exmandatario declaró que en democracia se “gana y se pierde”, y que “hoy” estaba retirado de la política.
En el búnker de Unión por Cór doba, algunos dirigentes schiarettista de segunda línea se habían preguntado si De la Sota no se había corrido a tiempo para evitar quedar pegado a la magra cosecha de votos de Unión por Córdoba.
En este contexto de algunos roces entre las segundas líneas de ambos referentes peronistas provinciales, en el Centro Cívico consideran que lo peor que les puede ocurrir en este momento es una disputa pública entre Schiaretti y De la Sota.
Los delasotistas consideran que el exgobernador hizo lo que le pidieron desde el comando de campaña. Estar presente en actos que se realizaron en Río Cuarto, en Marcos Juárez, en Bell Ville y en el cierre en la ciudad de Córdoba, donde estuvo en el escenario, pero no dirigió la palabra.
De todos modos, en los comentarios de pasillo en el Centro Cívico apuntan a dirigentes delasotistas del interior que, supuestamente, no se habrían comprometido en la campaña.
La derrota en el departamento Río Cuarto, dominado por dirigentes que responden al exgobernador, fue una de las cuestiones que anotaron en tinta roja los hombres más cercanos al gobernador Schiaretti.
Para lo que viene, en el entorno de Martín Llaryora no esperan un rol protagónico de De la Sota.
“Ya lo anticipó en sus declaraciones públicas. Dijo que, por ahora, está afuera de la política y que lo vive como un ciudadano más. Más claro, echarle agua”, graficó ayer uno de los dirigentes más cercanos al primer candidato a diputado nacional de Unión por Córdoba.
Es probable que Schiaretti baje su perfil, para que Llaryora tenga más protagonismo en la campaña para las elecciones de octubre.
Una de las apuestas será el debate de candidatos que se hará antes de los comicios legislativos.
En el PJ consideran que el vicegobernador tiene mayor experiencia y mejor discurso que Héctor Baldassi, el primer candidato de Cambiemos, para tratar de marcar una diferencia.
De todos modos, en el oficialismo entienden que es imposible revertir el resultado y que el gran objetivo es conseguir tres bancas y tratar de achicar la diferencia.