El misterio de los cadáveres en el cuarto, cerca de resolverse
Las muertes de un joven y de la expareja de su padre, ambos con varias puñaladas, habrían sido un homicidio seguido de suicidio. El cuadro fue descubierto semanas atrás en una cabaña en la localidad de Los Reartes. Sospechan que el drama se extendió duran
La investigación judicial estaría más cerca de descartar el doble crimen de Rodrigo Mercante (24) y de Cora Calderón (40), hallados apuñalados en la mañana del pasado lunes 7 de este mes en una vivienda de Los Reartes, la pequeña comuna del Valle de Calamuchita.
A dos semanas del trágico episodio, no se ordenó ninguna imputación ni tampoco hubo allanamientos, y los investigadores avanzan sobre una de las hipótesis iniciales y centrales: un homicidio seguido de suicidio.
La autopsia arrojó que los cadáveres presentaban varias puñaladas, a la altura del pecho y del cuello, y que la causa del deceso está relacionada a un shock derivado de las heridas cortantes.
En la investigación surge, además, que el joven habría intentado matarse con otra metodología, antes de las cuchilladas en el cuello. Un indicio, en ese sentido, que se está investigando, está relacionado a las marcas que tendría en el cuello, presuntamente compatibles con la presión de una soga.
Para ello habría usado una ventana, según algunas pruebas que acumula el expediente judicial.
La diferencia horaria de las muertes también se acercaría a la hipótesis dominante.
Si bien aún faltan algunas pruebas concluyentes, los detectives sostienen que el joven habría apuñalado a la expareja de su padre alrededor de las 22 del domingo, y luego habría terminado con su vida a las 4 del lunes.
Horas después, el peor escenario fue descubierto por la novia del muchacho.
En la casa había huellas de sangre por todos lados. Se sospecha que serían del joven tras haber apuñalado a la mujer.
Rodrigo vivía con su novia a unas cinco cuadras del inmueble donde sucedió todo. La casa es de una familia que vive en Buenos Aires y el joven estaba a cargo de su cuidado y mantenimiento.
El porqué, sin respuestas
Un pesquisa confió que estaría descartada una relación sentimental entre las víctimas.
No es menor para los investigadores que ambos hayan sido encontrados tendidos sin vida en la cama. La mujer ya no convivía con el padre del joven ahora fallecido, con quien tenía dos hijas en común.
Un testigo declaró que Cora habría frecuentado otras veces la casa que cuidaba Rodrigo.
Parte del pueblo ya pasó por la Fiscalía de Andrea Heredia Hidalgo, en Río Tercero, para declarar.
Varios vecinos han coincidido en que la relación entre ambos era la de una madrastra preocupada por un muchacho que supuestamente consumía drogas.
Ese punto se sigue indagando, ya que se habrían secuestrado estupefacientes en la escena del crimen.