Era de bajo riesgo, hubo altas llamas
Un depósito gigante del Mercado de Abasto, con equipos y con contenedores de frutas y de verduras, fue afectado por un incendio. El establecimiento no tiene certificado de Bomberos, pero la ordenanza tampoco lo exige. El municipio sostiene que “todo func
Unos 600 metros de largo por 50 de ancho, con equipamiento y con decenas de contenedores de frutas y de verduras se incendiaron ayer. Las llamas que cubrieron por lo alto y por lo ancho el depósito del ala sur del Mercado del Abasto se iniciaron durante la madrugada.
Mercadería, mulitas de carga, tarimas y cajones de madera. Todo fue combustible para el fuego que las cuatro dotaciones de Bomberos que asistieron tardaron horas en apagar.
Ante las dudas generadas durante las horas que siguieron al incendio, Fuerza de la Gente informó que hoy tomará estado parlamentario un pedido de informe para que se explique si el lugar cuenta con el Certificado de Inspección Final de Protección contra Incendios.
La respuesta llegó de inmediato: no existe ese certificado de Bomberos, porque la normativa no lo exige para el Mercado de Abasto. “No lleva una habilitación de Bomberos, porque tiene una categoría de riesgos que no lo justifica. Igualmente, funcionó todo absolutamente bien, tanto el sistema de cisternas como las demás medidas de higiene y seguridad”, se indicó. Lo concreto es que el fuego destruyó por completo las instalaciones.
Tipificación específica “Venta al por mayor en comisión o consignación de frutas, hortalizas y verduras en el Mercado de Abasto” establece la ordenanza de habilitación de establecimientos 12.052. La norma no especifica metros cuadrados ni materiales que pudiera tener el depósito: todo el Abasto es de riesgo intermedio y, por tanto, no requiere certificado de Bomberos.
Según la ordenanza, sólo la categoría de riesgo alto requiere la certificación de la Dirección de Bom- beros de la Provincia de Córdoba. Esta incluye la venta al por mayor en comisión o consignación de energía eléctrica, gas y combustibles, talleres de instalación de equipos de GNC, fabricación de fósforos y fabricación de papel, productos de papel y cartón, entre otros.
Para las de riesgo intermedio –como el Abasto–, se exige certificación de las condiciones de higiene, seguridad y protección contra incendio, tipificadas en un protocolo formulado para tal fin por un profesional habilitado y matriculado en la materia.
Además, el profesional deberá dictar el curso obligatorio de seguridad e higiene a los titulares, los encargados y los empleados del establecimiento, otorgando una constancia que certifique la realización del mismo.
Desde la Municipalidad, sostuvieron que todos estos procesos fueron realizados en el Abasto y están documentados.