Más de 90 desvíos en recorridos de las líneas de transporte
El 20 tiene que hacer dos cambios de recorrido, esquivando obras. En la calle Javier Díaz, el rodeo es de varias cuadras: Ricchieri, Justiniano Posse, Garzón y su ruta, como se dice en estos casos; y en Obispo Salguero, otra vez, una vuelta de tres calles: Santiago del Estero, Paraná, Poeta Lugones y su ruta. En Javier Díaz y Belardinelli, también en barrio Jardín, el 26 tiene que hacer un rodeo mayor, tocando siete cuadras en su desvío. El 30, cuando va por la avenida Vélez Sársfield y llega a Langer, tiene que cruzarse al carril contrario para atravesar la rotonda de Las Flores, donde las obras demandarán al menos 20 días más de trabajo.
Y así en cada línea, en cada recorrido. Según informaron las empresas Ersa y Aucor, hay 83 desvíos de recorridos activos en las líneas que administran. Coniferal, que tiene el 30 por ciento restante del sistema, tiene otros 12 en sus registros.
“En diciembre empezamos el mes con 120 desvíos y lo terminamos en 53; así comenzamos enero y lo terminamos en 75. En febrero comenzamos en 76 y a la fecha tenemos 83”, detallaron desde la administración de Ersa y Aucor.
No todos los desvíos se corresponden con cantidad de obras, aclaran tanto desde la Municipalidad como desde las empresas. “Cuando decimos desvío, nos referimos a los cambios de recorrido en las líneas. Un mismo corte puede generar desvíos en varias líneas”, advierten. “Si está cortada la intersección X y por ahí pasan tres líneas, cuentan como tres desvíos”, ejemplificaron.
Voceros municipales confirmaron que los cortes por obras son informados por la propia gestión y que se coordinan y consensúan los cambios de recorridos planteados desde las área de Tránsito de las empresas.
Se mueven
La dificultad que más quejas suscita entre los usuarios es que no saben dónde tomar el colectivo por los cortes. Miguel Tolosa, jefe de Tránsito de Coniferal, confió que la empresa le encontró la vuelta al problema instalando “paradas móviles”. En la zona de la Recta Martinoli, donde los trabajos complementarios del cierre del anillo de Circunvalación obligan a varios desvíos, Coniferal puso paradas con base de hierro atadas con cadenas a postes de alumbrado o de Epec. “Las atamos a los postes en las cuadras donde pasa el cambio de recorrido para que los usuarios sepan dónde esperar el colectivo. Están funcionando bastante bien”, confió Tolosa.
Algo parecido hacen las líneas de Ersa y Aucor. “Tenemos paradas móviles o directamente colocamos las chapas en postes de luz que hay disponibles en los recorri- dos alternativos. Siempre intentamos anticiparnos, pero muchas veces las notificaciones llegan después de la implementación del desvío”, confió un vocero.
Coniferal calcula que los efectos de los desvíos en la demora en la velocidad comercial (el tiempo promedio que lleva hacer un recorrido) y en las frecuencias se podrá estimar mejor en marzo, cuando tanto el volumen de tránsito como el regreso de las clases pongan a la ciudad en ritmo normal. “Se vienen agregando unidades e incrementando frecuencias para tratar de paliar estos problemas”, dijo Tolosa.
“En relación con el impacto en la velocidad comercial, es muy variable en función del estado del
tránsito y del momento del día. En general puede oscilar entre los tres y los 20 minutos, pero hemos tenido casos aún mayores. Por ejemplo, hoy la línea 80 que llega hasta el Ipef, por la obra del Kempes debe realizar el retorno por Villa Belgrano. Eso significa que debe realizar tres kilómetros más. Con un tránsito normal, ese recorrido debería demorar ocho minutos aproximadamente. Sin embargo, hemos registrado demoras de hasta media hora, sólo para que el coche pueda comenzar la vuelta inversa”, contaron desde Ersa.
“La gente se queja mucho, pero no tenemos medios para que todos se enteren de cada desvío en el mismo momento en el que surge”, plantearon las empresas.